Bautista responde a la acusación de Iannone: “Menos mal que hay tiempos...”

El reencuentro entre Álvaro Bautista y Andrea Iannone con el Mundial de MotoGP presentó alguna que otra similitud. Ambos regresaban a la categoría reina durante el GP de Malasia y además, lo hacían al manillar de una Ducati que está considerada la mejor moto de la parrilla. Sin embargo, en poco se parece ese prototipo y todas las evoluciones que ha ido incorporando por el camino, con las monturas junto a las que compitieron el español y el italiando durante su andadura en el campeonato. Volver era sinónimo de aprendizaje, pero también una especie de regalo por parte de los de Borgo Panigale que ninguno de los dos quiso desaprovechar, como admitió en esta ocasión el sustituto de Di Giannantonio en el VR46: “Igual él (Valentino Rossi) creía que iba a dudar un segundo, pero inmediatamente le dije: ‘Ok, perfecto’. No tenía ninguna duda sobre la respuesta”.

Cinco años después de haber abandonado el Mundial tras haber sido inhabilitado por dopaje, Iannone quiso probar suerte con una “MotoGP que ya no tiene nada que ver a lo que conocía”. El italiano aprovechó “un regalo” que le dejó “agotado” tras haber corrido “toda la carrera en modo supervivencia”. Pero sin embargo, al acabar tuvo muy presente la actuación que Álvaro Bautista completó con la GP23 tan solo un año antes. El español fue recompensado por Ducati tras su bicampeonato en el Mundial de SBK y el premio, llegó en forma de una MotoGP que no pudo exprimir al máximo como explicó tras la carrera en Sepang, a donde llegó lesionado: “En los test de Jerez (de SBK 2023) me pegué en el cuello. No he tenido síntomas de dolor en especial, pero desde que me monté el viernes en la moto me quedaba sin fuerza en el brazo”.

A pesar de todos los contratiempos con los que luchó el piloto español durante su aparición en Malasia, más allá de la adaptación que requería la Ducati, Álvaro fue capaz de ver la bandera a cuadros en la carrera dominical. Una gesta idéntica a la que completó un Iannone, que no dudó en señalar al talaverano: “He aprendido que he sido 15 segundos más rápido que Bautista el año pasado con una moto prácticamente igual. Además, él tuvo más tiempo de adaptación, mientras que yo simplemente hice la maleta en Jerez y vine para acá (Sepang). Mi referencia debe ser esa, no Bagnaia”. Un apunte que el bicampeón de SBK no ha querido dejar pasar: “Madre mía, menos mal que hay tiempos...”.

“La realidad es que ha sido exactamente dos minutos más rápido que yo, con una vuelta menos (de carrera). Si a mi tiempo le quitas una vuelta, para hacer 19 como hizo él, soy tres segundos más rápido... y lesionado”, continuaba explicando Bautista en sus redes sociales, sobre una realidad que Iannone no quiso tener en cuenta. Solo se quedó con su buena actuació: “Con solo tres días de pruebas y un par de días de descanso, podría mejorar mucho más. Estoy contento porque me agrada saber que puedo seguir siendo rápido, y eso es lo que me importa. Todos lo saben, han visto los datos, y eso es lo positivo. No debía cometer errores y tenía que terminar la carrera. Lo logré, pero obviamente correr una carrera es otra cosa, se necesita una preparación física importante”.