Bagnaia monta un lío con su idea de MotoGP: “Es una gran gilipollez”

El GP de Francia de MotoGP no estuvo exento de acción y polémicas en el asfalto, y al que le pareciese poco, también tiene para entretenerse con algunas declaraciones que se dijeron después, en especial, las de ‘Pecco’ Bagnaia. El italiano volvió a expresar su preocupación por la cantidad de incidentes que se está viendo esta temporada y propuso aumentar la diferencia que hay entre las motos oficiales y las satélites, algo que no ha gustado nada a muchos de los implicados en el Mundial, como Herve Poncharal, jefe del Tech3 y presidente del IRTA.

Primero, repasemos lo que dice Bagnaia: “Un piloto que va por detrás, y quizás no tiene potencial, quiere pasar a seis pilotos en una vuelta y no funciona así. Los incidentes ocurren sobre todo en la primera parte de la carrera, probablemente porque hay demasiada emoción. Deberíamos hacer algo para mejorar la situación, no es seguro así, no es lo mejor. Desde la primera hasta la última moto, todos pueden ganar, ya no quedan esas seis o siete décimas que había antes entre las motos de fábrica y las clientes, que creo que hacían falta”.

“Los 4 Fantásticos (Rossi, Stoner, Lorenzo y Pedrosa) surgieron porque eran más fuertes, pero tenían motos de fábrica. Los demás estaban bastante lejos porque no tenían el potencial para estar delante a nivel técnico. Ahora el nivel es extremo, todo se lleva al límite. Cualquiera puede ganar, Augusto Fernández fue cuarto (en Le Mans) y es su temporada de ‘rookie’. En mi opinión, tenemos que volver a tener un poco de diferencia entre las motos de fábrica y las de los clientes, o encontrar una solución para evitar ciertas cosas”, apunta el de Ducati.

La respuesta de Poncharal

Y Poncharal le responde en ‘Paddock GP’ con una mezcla de sorpresa e indignación: “Me sorprendió mucho del actual campeón, de alguien al que tengo mucho respeto y admiración, y siempre es bastante tranquilo en sus comentarios, leer tal enorme cosa, hasta podría decirse una gran gilipollez, porque Pecco, como todo piloto, viene de Moto3, pasó por Moto2 y llegó a MotoGP en un equipo independiente. Él estaba feliz de tener una moto de alto rendimiento que le permitió hacerse notar. Y luego, le ofrecieron una de fábrica”.

“Y cuál fue mi sorpresa, cuando se benefició de este sistema, leer que sería bueno que haya seis o siete décimas entre ellas y las oficiales para que puedan divertirse entre los ricos y poderosos”, añade el francés, que asegura que tener esa igualdad entre las motos oficiales y las satélites “es genial para todos”: “Nos permite a los equipos independientes convencer a nuestros socios de que también podemos atraer a patrocinadores porque no sólo están aquí para llenar la parrilla, también pueden ganar carreras y, eventualmente, ir por el título”.

“Lo que se ha publicado está fuera de contexto”

Después de leer las declaraciones de Poncharal y otras reacciones, Bagnaia aseguraba en Autosport que “lo que se ha publicado está fuera de contexto por la interpretación que han hecho algunas personas”: “Me preguntaron sobre la seguridad y las razones del aumento de accidentes y simplemente traté de hacer una analogía y dije que esto no pasaba antes. Creo que hace años había menos contactos porque había mucha diferencia entre los pilotos de cabeza y los demás. Ahora todo está mucho más ajustado. Llegué a MotoGP con un equipo satélite, ¿cómo voy a proponer crear un hueco entre las motos de fábrica y las satélite?”.

“La bola de nieve se ha ido haciendo cada vez más grande cuando, en ningún momento, hice algún comentario para crear polémica. Al contrario, soy consciente de que este es un tema muy serio. Lamentablemente estamos entrando en una dinámica en la que algunas personas prefieren buscar la polémica. Estoy cansado de tener que justificar cada palabra que se saca de contexto como pretexto para abrir una polémica”, cierra el italiano, que ahora sólo se preocupa por llegar al cien por cien al próximo GP de Italia (11 de junio) al descubrir en unas pruebas que sufrió una rotura parcial del astrágalo del pie derecho en su caída con Viñales en Le Mans.