Álex Márquez: “Las reglas no son iguales para todos”

Otro fin de semana más y otro gran premio que acaba con polémicas en los despachos de los comisarios de MotoGP. Tras la carrera en Japón, Dirección de Carrera vuelve a ser la gran señalada... y Álex Márquez el protagonista de la historia. El piloto del Gresini Racing recibió una sanción este pasado domingo tras su incidente con Joan Mir, en el que ambos pilotos se quedaron fuera de carrera. El de Honda se mostró muy enfadado ante la prensa y, aunque recibió las disculpas del español, le criticó duramente por una acción en la que se podía haber hecho mucho daño. Así lo entendieron los comisarios que, lejos de dejarlo en un lance de carrera, optaron por aplicarle una Long Lap al pequeño de los Márquez que tendrá que cumplir la próxima semana, en el GP de Australia. Eso sí, lo acepta, aunque para nada conforme con la decisión.

Consciente de su fallo, el bicampeón del mundo se disculpaba ante Joan por arruinar su domingo: “He cometido un error en la curva 11 que me hizo salir un poco de la trazada, y en el intento de volver a mi posición, entré en contacto con Mir, lo que me hizo caer. Nuestras motos se engancharon y le pido disculpas por haberlo dejado fuera de la carrera”. No alivia mucho el visible cabreo del mallorquín, que le reprochó el haberle “dado por detrás como un misil, sin pensar”. “No me ha hecho daño de milagro”, decía el campeón del mundo de 2020 ante la prensa en Motegi, antes de que su rival se disculpara por la acción.

Dejando ya atrás el GP de Japón, Álex Márquez mira a Australia donde “toca recuperar” y cumplir una sanción con lo que no está de acuerdo. “Siete días atrás, en la curva tres (de Mandalika, en el GP de Indonesia), otro piloto me tocó de la misma manera y no se hizo nada”, recuerda el pequeño de los hermanos Márquez, que destaca la diferencia de sanciones de Dirección de Carrera desde hace varias carreras. De hecho, por la no sanción de Bastianini en la segunda cita de Misano (cuando pasó a Jorge Martín en la última vuelta echándolo de la pista), el español se quejó de los constantes cambios de opinión de los comisarios, que no son claros a la hora de imponer castigos: “En otras ocasiones han sancionado. Entonces, siguiendo el parámetro ese, era sancionable”. Y en Japón les señaló directamente: “Esto demuestra que las reglas no son iguales para todos, pero haremos de la virtud una necesidad”.