“Aleix es un compañero difícil en la pista y muy bueno fuera”

La versión más centrada de Maverick Viñales de la historia continúa su curso. Él era de los que veía venir la retirada de Aleix Espargaró, porque le conoce bien, y no quiere entrar a decir qué dos pilotos querría que estuvieran en el box oficial Aprilia del año que viene. Él podría ser uno de ellos, pero también mira más allá de su actual box.

-¿Qué puede decir de la noticia de la retirada de Aleix?

-Es un compañero de equipo difícil en la pista, y muy bueno fuera de ella. Difícil en el sentido de que cuesta ganarle, pero me llevo muy buenos recuerdos. Buenos recuerdos en pista y fuera de ella, muchas experiencias vividas. Empezamos el proyecto de Suzuki juntos, lo llevamos a ganar, yo entré un poco más tarde en el proyecto de Aprilia, pero también lo hemos llevado a ganar. Así que creo que ambos hemos conseguido triunfos muy importantes. Desearle lo mejor para esta nueva etapa. Yo no me esperaba para nada que parara, porque realmente, de los cuatro pilotos de Aprilia, Aleix y yo estamos haciendo mucha diferencia, y eso lo ves en los datos. No entendía muy bien cuando ha dicho hoy que iba a parar.

-Él también insistió mucho en su momento para que Aprilia fuese a por usted cuando pasó lo de Yamaha, ¿no?

-Sí, uno de los principales motivos por el que me decidí por Aprilia fue eso, que estaba Aleix y me dio la tranquilidad y la confianza, me explicó bien el proyecto y lo entendí. Eso me dio confianza para dar el salto. Hubiera sido Aprilia u otra marca, pero en este caso me valió para decantarme por ellos.

-¿Quiénes le gustaría que fueran los pilotos de Aprilia el año que viene?

-Mala pregunta…

-No hay ningún piloto firmado para el año que viene…

-Sí, curioso… Ahí hay dos sillas libres, y no lo sé. A ver cómo juega Massimo a la ruleta.

-¿Qué le pide el cuerpo?

-A mí me pide ganar, por eso me levanto cada mañana a luchar, para ganar. Veremos en el futuro. Ahora mismo aquí siento que, en ciertos aspectos, tengo la oportunidad y tengo las armas. Depende de qué circuitos no se llega a más, pero en muchos tenemos la ocasión. Y eso me gusta.

-¿Un compañero potente le ayudaría a crecer más aún?

-Si viene con ideas buenas, sí. Ahora, si viene a romper la trayectoria que llevamos, no lo sé. ¿Qué piloto bueno queda?

-Bastantes: Martín, Márquez, Bastianini, Bezzecchi…

-No, no se van a mover. ¡Qué se van a mover! En este momento están en la mejor moto.

-Pero casi todos quieren el mismo sitio.

-Da igual. Si quieres luchar con las mismas armas ya sabes lo que tienes que hacer. Yo lo he sentido: irte a una moto nueva es difícil, aunque sea la mejor. Es difícil, hay que adaptarse, tus rivales del mismo equipo tienen más experiencia. Llegas el primer día y te dicen: ¡Pum! Aquí lo tienes. Para mí ha sido un camino difícil. No sé qué tiene en mente Massimo, pero tiene una buena oportunidad. Tampoco creo que sea fácil para Aprilia la situación que tienen. Creo que habría sido más cómodo que Aleix se hubiera quedado y que hubiesen seguido la dinámica de estos años.

-¿Tiene mucho que pensar?

-Yo tengo que pensar en el domingo (Risas). No, todavía es muy temprano, hay mucho tiempo. Me he puesto de fecha límite julio, imagina si tengo tiempo para pensar.

-¿Y si para entonces está cogido lo mejor?

-Yo es que pienso que cada carrera me da más armas, porque al final puedo demostrar más, todo lo que en estos años no he podido demostrar. Me sirve cada carrera que pasa para ser más fuerte y tener más peso en las decisiones que pueda tomar.

-¿Esta es una carrera de esas marcadas en rojo por los resultados del año pasado?

-Yo creo que todas, todas las tenemos marcadas como tenemos que dar el cien por cien, y cuando lo hacemos la podemos luchar. Es obvio que es un fin de semana en el que piensas que puedes hacerlo, pero hay que ver. Hay que estar tranquilos, hay que trabajar con calma, sabemos que va a ser un fin de semana complicado de gestionar porque, claro, todo el equipo tiene una ambición muy alta y hay que frenarles. Hay que trabajar y ver si los demás han mejorado o no, hay que estar preparados. Pero la condición con la que venimos es a luchar y a intentar ganar, es obvio.

-En clave campeonato, ¿tiene moto para pelear por el Mundial?

-Es complicado decirlo. Este Mundial es tan incierto. Te doy un ejemplo rápido. A principio de año en Ducati ‘vibración, vibración’. Ahora la tenemos nosotros. Esto es muy raro, no sé qué decirte. ¡Es que todo cambia tan rápido! Pero hay que estar ahí, hay que estar preparado. El problema es que como hay ocho, ¿qué haces? Me peleo con cinco. Al final si fueran dos, en Le Mans habría estado en el podio. Pero al ser ocho, cuesta. Al menos cinco son rapidísimos cada fin de semana. Y hay que lucharlo mucho.

-¿En Montmeló la Aprilia es la mejor moto?

-El año pasado sí. Ahora mismo no lo sé. Cuando acabe el viernes tendremos más datos. Es la misma dinámica de siempre. Austin es un circuito tabú para Aprilia, y se ganó. Es todo muy relativo. Lo que sí que podemos controlar es estar preparados y tener la moto al cien por cien para pelear por la victoria. Pero luego hay condiciones externas que no las puedes controlar.