“No somos arrogantes, queremos aprender”

Su historia habla por sí sola. En sus vitrinas cuentan con ocho títulos del Mundial de Rallys, cuatro Touaregs del Dakar y tres coronas del Mundial de Turismos. Así que el éxito va asociado a Citroën cuando se habla de competición y aterrizan en la Fórmula E con la intención de perpetuar esa conexión con el automovilismo. Llegan para ganar, como dejó claro Jean-Éric Verge, quien forma el nuevo dúo con Nick Cassidy, en la presentación del equipo en París. Sus dirigentes, también, pero se marcan plazos.

“Es nuestra primera vez en la FE y no somos arrogantes, queremos aprender, pero tenemos a dos pilotos que están aquí para ganar, la presión está sobre nosotros”, reconoce Xavier Chardon, CEO de Citroën, en una charla con medios internacionales, AS entre ellos, en la que habla de lo especial que es este regreso a la competición de primer nivel: “Es muy importante. Es nuestro 60º aniversario en el deporte y la FE es un campeonato muy interesante, sobre todo por la electrificación y su cobertura mundial”.

“Además, es el banco de pruebas perfecto, es la combinación perfecta. Estamos muy felices y aprenderemos”, incide Chardon. Jean-Marc Finot, vicepresidente de Stellantis Motorsport, grupo al que pertenece la marca francesa, señala además de algo clave como “el desarrollo técnico de la pista a la carretera”, que “hay una parte emocional” en su regreso: “Nuestro último programa de fabricantes fue en rallys hasta 2019 y es la hora adecuada para volver al máximo nivel en un Mundial de la FIA”.

Sobre ello también incide Chardon: “Creemos que la FE es una buena inversión, aunque no lo hacemos solo por motivos racionales, sino porque también tenemos esa pasión de conectar otra vez con los aficionados y traer brillo a la marca también para nuestros trabajadores, recuperar esa conexión que funcionó en el WRC. Cuando ganábamos el domingo, toda la gente estaba feliz y motivada el lunes. Es emoción, orgullo y mantener a la gente unida”.

Y tener un embajador francés como Vergne, “es muy importante”, aunque lo que buscaban era “pilotos top, que puedan llevar el coche al podio y ganar carreras”. Y Finot cree que cuentan con “una de las mejores parejas de la parrilla” y mucho más: “Tenemos todas las herramientas: un muy buen equipo, la tecnología del motor, muy buenas habilidades… Eso tiene que evolucionar para ser competitivos. Nos llevará tiempo, pero esperemos ofrecer emociones a los fans de Citroën lo antes posible”.

¿Cuándo será eso? Es pronto para saberlo, pero prefieren empezar con un perfil bajo. “Será una temporada de aprendizaje, pero lucharemos por ser competitivos en cada carrera. Tendremos más información en los test y en la primera carrera”, responde Finot, que no ve problema la competitividad entre los dos equipos de Stellantis: “Si tenemos que elegir entre quién queremos que gane, si Citroën o DS, es un problema de ricos… (ríe). Seremos felices de tomar una decisión así”.

El privilegio de tener seis fabricantes

Por su parte, Jeff Dodds, CEO de la Fórmula E, celebra la llegada de otra firma potente a la parrilla eléctrica: “Somos muy privilegiados de tener un campeonato con seis fabricantes (Porsche, Jaguar, Nissan, Stellantis, Mahindra y Lola), si lo comparas con la F1 creo que tienen cuatro, la IndyCar, dos, y la NASCAR, uno. Así que es un placer dar la bienvenida a una marca con una historia increíble en el automovilismo como Citroën y traen una conexión muy fuerte con nuestros valores, es un ‘match’ perfecto”. “Habrá nuevos equipos que se unan al campeonato con el Gen4 y que Citroën llegue ahora significa que tendrá un año para aprender y estar en una mejor posición que los que vengan después”, añade el estadounidense.