INDYCAR | ROAD AMERICA

La IndyCar se aleja del caos de Detroit

El campeonato americano llega a Road América, trazado en el que Palou ha ganado dos de las tres últimas carreras. Está a 18 puntos del líder, Dixon.

C Jones

La IndyCar deja atrás el caos del circuito de Detroit, en el que se dio un cambio de liderato que pasó de manos de Álex Palou a las de Scott Dixon, pero permanece en el equipo Ganassi y afronta este fin de semana la cita de Road América (domingo 21:30; Movistar Deportes). El trazado de Wisconsin de 6.515 metros debe brindar, sobre el papel, una carrera más tradicional y menos loca que la vivida en el callejero de Michigan. En Detroit ya surgieron voces críticas de algunos pilotos por los innumerables incidentes (hasta 8 banderas amarillas y el coche de seguridad de Oriol Seviá repostando por el excesivo trabajo), muchos de ellos en las resalidas. Las estrecheces, las curvas de 90º del circuito urbano, y la lluvia, dieron como resultado una carrera impredecible.

Los circuitos tradicionales son en los que Palou se siente más cómodo. Este año, sin ir más lejos, ganó el desafío millonario en The Thermal y la carrera en la variante interior de Indianápolis. Y retrocediendo un poco más en el tiempo, el barcelonés ha ganado en este escenario dos de las últimas tres carreras (2021 y 2023). Buenos precedentes para empezar a recortar los 18 puntos que le saca Dixon en la general.

El neozelandés, además de un pilotaje consistente, siempre emerge cuando las cosas parece que le van mal, es un experto en correr con estrategias totalmente diferentes a las principales. Esa fue una de las bases de su éxito en Detroit. “Estábamos en la estrategia correcta. Siempre hay que tener en cuenta las variables. Y tratar de no meterse en problemas, tratando de mantener el coche en el camino correcto. El equipo estuvo genial”, explicaba el nuevo líder de la serie americana antes de llegar a Road América.

Álex Palou, por su parte, vivió la cara amarga del caos y se vio envuelto en un accidente en el que nada pudo hacer. Se encontró el Penske de Newgarden trompeando y chocó. “Día salvaje. La carrera más loca en la que he participado. De todos modos, mi equipo hizo un trabajo excelente durante todo el fin de semana y no puedo esperar a tener una carrera adecuada el próximo fin de semana”, explica el catalán.

En cualquier caso, suceda lo que suceda en Elkhart Lake, el bicampeón de la Indy no tendrá casi ni tiempo de pensar, porque el mismo lunes le espera un avión para viajar hasta Le Mans, donde participará en las 24 Horas a bordo de unos de los Cadillac. En otro estará Scott Dixon. Y en Lamborghini estará Romain Grosjean. En LMP2 competirán Nolan Siegel (United Autosport) y Kyffin Simpson (Nielsen Racing).

Lo más visto

Más noticias