Márquez: “El Alemania-España me ayudó a combatir el dolor”

Rápido en la pista como para remontar en el esprint del decimotercero en la parrilla al sexto, y lento en la sala de prensa para moverse fruto del dolor en el costado derecho, por la dura caída de ayer. Es Marc Márquez, el que nunca se rinde, lo que ha salvado su contnuidad en el GP de Alemania, algo que tuvo muy en el aire el viernes por la tarde.

-Se le ve muy tieso...

-Bueno, tieso, pero de momento aceptable. Te lo diré de aquí a dos horas cuando se pase el coctel que llevo dentro (Risas) Ahí veré la realidad. Sí que es verdad que he corrido con el máximo anti dolorífico que podemos tomar, porque el dolor en las costillas, sobre todo cuando suben las pulsaciones, es alto. Por eso ayer di tres vueltas, hoy por la mañana tres más. Y en la sprint race la verdad es que bastante bien, pero lo dije el jueves, si queremos luchar por la victoria tenía que hacer un fin de semana perfecto, y ha pasado de todo. Todo lo que podía pasar en el box ha pasado, todos los problemas que podíamos tener han pasado, donde me podía caer de peor manera lo he hecho, y la peor suerte de la Q1 es que…

-¿Bradl?

-No, no diría Bradl, para mí ha sido el problema mecánico que he tenido con la segunda moto. Sin ese problema mecánico pasábamos, porque me encontraba bien. Me estoy encontrando muy bien con la moto pero saliendo el decimotercero, aquí en Sachsenring, donde se hace un tren, y sólo hay uno o dos sitios de adelantamiento, es muy difícil.

-¿Le ha mermado mucho la parte física? ¿Se parece en algo la molestia en las costillas a la del año pasado?

-No, la gran suerte es que hay sólo dos curvas de derechas, porque es la parte derecha de las costillas, y no hay frenadas fuertes en este circuito, sólo la curva 1, es donde más sufre. Todo y así me puedo defender bien.

-¿Se ha planteado bajarse de la moto este fin de semana?

-Sí, sí. Tal y como estaba ayer no me habría subido hoy, pero me he levantado medio bien, y he decidido probar tres vueltas, sobre todo después de hablar con los doctores y que chequearan bien todo, mi principal preocupación es que pudiera ir a peor, las costillas y sobre todo el dedo, porque tengo una fractura y se va moviendo un poco. Pero me han dicho que si lo fuerzo hoy y mañana no pasará nada.

-¿Le da rabia viendo la velocidad que tiene este fin de semana estar perdiendo una oportunidad?

-Sí, sí, pero tendremos más, sé que no será la última. Es verdad que en un fin de semana que pintaba bien, y luego sales a pista en el primer entrenamiento y te encuentras muy bien, pues dices ‘esto irá bien’. Pero se empezó a torcer con cambios de motos, saliendo tarde a pista, saliendo con la moto que no tocaba, luego la caída en la 11… Se ha torcido todo. ¿Lo bueno? Que todo y así hemos estado sextos en carrera, y en las vueltas que tenía limpias rodaba en un tiempo muy similar al grupo de cabeza.

-¿Puede explicar lo que ha pasado en la Q1 en el box? Y por la mañana, que has salido y has tenido que volver por una historia con los semi manillares.

-Sí, bueno, teníamos un problema con la moto ya ayer. Salía, paraba, cogía la otra moto, por la tarde igual, y todo esto tampoco ayudó en la caída de la 11, porque cambias los neumáticos de una moto a la otra, sales, ya no tienen la temperatura perfecta, y es ahí donde se me cerró de delante yendo lento. Pero estas cosas pasan. Son problemas que ha tenido el equipo, experiencia para el futuro, pero también han hecho un grandísimo trabajo reparando la moto y, sobre todo, solucionando todos estos problemas durante los entrenamientos, que es lo que cuenta.

-Ha dicho que ha pasado de todo. Cuando ocurre esto, ¿cómo lo ve? ¿Cree en el destino, en la suerte? Todo el mundo le veía ganando aquí…

-Bueno, respiras. Y justo lo dije el jueves, y lo repito ahora: el año pasado aprendí que si las cosas se tuercen no hay que volverse loco. Respiras, haces el máximo en la Q1. En la sprint, sales el 13 y no me volveré loco, iré adelantando poco a poco hasta donde llegue. Y la semana empezaremos las vacaciones, y de aquí a tres semanas tendremos otra carrera. Y ya está.

-¿Le dio tiempo a ver ayer a España contra Alemania?

-Hombre, me ayudó a combatir el dolor. (Risas)

-¿Qué le pareció lo de ayer y qué espera del partido contra Francia?

-Bueno, lo que me dio más rabia es que no pude gritar el gol de Merino. No pude saltar, estábamos ahí en el hospitality. La verdad es que es una selección que gane o pierda, la eliminen o no, son chavales que lo dan todo en pista, y todos los deportistas que lo dan todo, y ves que no hay más, que por ganas no ha sido, me da igual si pasan o no. Para mí Alemania era la favorita, o pintaba muy bien. Nos la hemos cargado, así que vamos a por Francia.