La cara delata a Sainz

La mochila recogida, las pilas cargadas y la impaciencia a flor de piel como si de la vuelta al cole se tratase. Tienen cierto parecido, porque el regreso del Rally de Marruecos también termina con un examen donde se pondrán a prueba conocimientos y se establecerán niveles para el destino final: el Dakar 2024. Pero no todos partirán con la misma nota. De hecho las calificaciones del raid (del 13 al 18 de octubre) serán más que suficientes para saber en qué situación se encuentra cada piloto, aunque ya hay quienes como Carlos Sainz que están confiados en superar con margen una prueba de reencuentros para algunos y cambios de ciclo para otros. Aunque, al final, será para todos una especie de regreso familiar.

Serán desconocidos los 1.470 kilómetros de lucha contra el crono entre Agadir y Merzouga, pero familiares los terrenos de un desierto que ha dejado a Carlos con ganas de más. El madrileño se probó con Audi (regresa con los tres coches) en unos test previos al Rally de Marruecos y confirmó sus buenas sensaciones en una publicación dónde le delató su sonrisa. “Mi cara lo dice todo”, confesó, consciente del buen estado de forma con el que afrontan el que puede ser el penúltimo baile del equipo alemán en un proyecto de tres años que marca el Dakar 2024 como fecha límite. En el caso del Mundial de Rally-Raid sí será, sin dudas, su última cita de un curso en el que la marca de los cuatro aros reaparece desde el pasado mes de enero con los mismos de siempre... dentro (Peterhansel y Ekstrom) y fuera del equipo.

Nani Roma forma parte de ese grupo de habituales porque su vuelta se entiende como la reanudación de un proyecto que interrumpió en 2022 por causas de fuerza mayor. Sin embargo el tiempo lo ha ordenador todo y el español regresa de la mano de un nuevo fabricante como Ford, que dejará en sus manos un Ranger T1+ con el que volver a buscar la gloria. Aunque primero deberán saborearla otros. Al Attiyah tiene a su alcance la segunda corona del Mundial W2RC y el regreso de Loeb (se ausentó en Argentina por problemas económicos en BRX), no es precisamente lo que puede dejarle sin título.

Será el Toyota de Al Rajhi quien ponga en apuros la corona del piloto qatarí, que a priori debería volver a Arabia con el Hilux. Aunque Gazoo Racing anunciará su alineación de equipos para 2024 tras el Rally de Marruecos. Quien sí volverá a surcar el desierto con el coche japonés será un Isidre Esteve que confía en que “el salto cualitativo que hemos dado este año se vea reflejado también” en un territorio como Marruecos, que tendrá a la navegación como otro de los grandes protagonistas.

Prueba de fuego para Schareina

En un escenario donde será más fácil que nunca perderse, las motos sufrirán como siempre los cambios de rumbo de una carrera que puede suponer la consagración definitiva de Schareina. El piloto, de 27 años, llega de ganar en Argentina el Desafío Ruta 40 y también, el respeto del resto de rivales. El único español de la cita junto a Santolino, será el sexto en discordia de una marca como Honda que llega con cinco motos en el equipo oficial (Van Beveren, Howes, Quintanilla, Cornejo y Brabec) y su gran promesa como pieza imprescindible a pesar de que, a priori, no debería contar con la nueva máquina del fabricante japonés en un momento decisivo para saber si podrán batir a KTM en la próxima visita a Arabia.

Price y Walkner defenderán al fabricante austriaco en la estructura oficial, mientras que Sunderland y Luciano Benavides lo harán a través de GasGas y Husqvarna, respectivamente. Siguen siendo sensibles las bajas dentro del seno austriaco, sobre todo en el caso de Kevin Benavides, pero lo importante es llegar a tiempo a un Dakar que está a punto de comenzar. Porque en Marruecos, se da la primera salida.

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