Ferrari y los límites de pista amordazan a Sainz

Sainz tuvo el ritmo y, por primera vez esta temporada, también el coche. Por eso se antoja doloroso cómo se le escapó el primer podio de la temporada en el GP de Austria. El madrileño se bajó del coche cuarto tras protagonizar una exhibición defensiva contra el Red Bull de Pérez y reseñar más ritmo que Leclerc durante todo el fin de semana, pero al abusón Verstappen le acompañaron en el ‘cajón’ Charles y Checo, por ese orden. Mereció Carlos el tercero, pero Ferrari falló, el muro se cubrió de gloria. Y ya por la tarde fue la FIA quien protagonizó un sainete con sanciones intempestivas por exceder los límites de pista que no se adjudicaron durante la carrera, y que relegaron al madrileño hasta la sexta posición. Alonso ganó una, la quinta, gracias al desastre de los ‘track limits’. Pero más allá de las anécdotas, el fin de semana en Spielberg no tracenderá como uno de los más satisfactorios para los dos pilotos españoles en 2023.

Desde el semáforo, se marchó Verstappen tras la arrancada y Sainz se pegó a Leclerc. Ferrari contuvo a Carlos en ese primer ‘stint’. “Si tienes más ritmo, háznoslo saber”, le dijeron. “¿De verdad hace falta que lo diga?”, respondió. Pero dio igual. No tuvo permiso para adelantar a su compañero cuando tenía al menos un par de décimas bajo la manga que le habrían ayudado a tomar aire delante. El error grosero llegó en la vuelta 14. Coche de seguridad virtual por avería de Hulkenberg. El muro decidió parar a ambos a pesar de que el periodo de ‘VSC’ iba a terminar de manera inmediata. Resultado: entraron Charles y Carlos al pit-lane separados por medio segundo, preparados para un doble pit-stop, y salieron distanciados con seis segundos de diferencia y tres coches entre ambos.

Sainz debió emplear el ritmazo de la jornada para recomponerse con adelantamientos a Hamilton, Norris y Pérez. Pero por ahí llegaron las sanciones en plena remontada: siete advertencias de límites de pista que se tradujeron en cinco segundos durante la carrera (irrelevantes) y diez más con la prueba terminada, estos definitivos. Cruzó cuarto la meta, después de una lucha intensa contra Checo, pero cayó hasta la sexta plaza. Entre unas cosas y otras, por el retrete se fue la oportunidad más clara de podio esta temporada, que sí se encontraría su compañero de equipo en un fin de semana generalmente más flojo, a juzgar por el esprint.

Sobrado a por la vuelta rápida

Max llegó a ceder el liderato temporalmente a Leclerc en el segundo ‘stint’, pero ganó tan sobrado que se permitió parar en boxes a dos vueltas del final para quitarle el punto de la vuelta rápida a Pérez. La logró bajo la bandera a cuadros y en plena niebla naranja. La marea holandesa se fue feliz a casa, aunque estaban extremadamente contentos desde que aparcaron la caravana el viernes por la tarde.

Mientras, Fernando certificaba el sexto puesto tras Norris en una carrera de pocas emociones para él, y para el aficionado alonsista en general, con un ritmo más bien gris. Se convertiría en quinto, y cuarto para el británico de McLaren, gracias al carrusel de sanciones buscado por Aston Martin (ellos presentaron la denuncia a los comisarios que desencadenó en los cambios) que afectó también a Hamilton (8º) y Gasly (10º) entre otros que no puntuaron. Red Bull Ring fue esquivo para el AMR23 igual que Montmeló antes, aunque la clasificación del GP y del Mundial al final transmiten otra cosa. A ver qué depara Silverstone.