Ricciardo regresa al Alpha Tauri
El australiano, de alta tras su lesión en la mano que se produjo en Zandvoort, se sube al coche que Liam Lawson llevó al noveno puesto en Singapur.
Daniel Ricciardo vuelve, una vez más, a la Fórmula 1 y en esta ocasión lo hace tras recuperarse de la lesión en su mano que sufrió después de estrellarse en el GP de los Países Bajos en Zandvoort. Desde entonces, Liam Lawson ha llevado el Alpha Tauri del australiano durante cinco grandes premios, con el meritorio noveno puesto en el GP de Singapur, el mejor resultado de la temporada hasta ahora de los de Faenza.
En cualquier caso, el neozelandés regresa a su rol de reserva y Ricciardo recupera el AT04 que heredó de Nyck de Vries a mitad de temporada, por el discreto rendimiento del neerlandés. “Es bueno estar de vuelta. Mi mano está mucho mejor, y el simulador fue una forma útil de evaluarla. Lo probé la semana anterior a Qatar, pero no me pareció que estuviera a pleno rendimiento, así que pasé el resto de esa semana en el Reino Unido, pasando más tiempo en el simulador, y llegué a un punto en el que me sentí preparado. Mi forma física general es buena, ya que seguí entrenando todo lo que pude, aunque obviamente no pude hacer mucho con la mano o el brazo izquierdos durante un tiempo”, comenta el australiano antes del GP de los Estados Unidos en Austin.
Por delante, Ricciardo tendrá cinco carreras para exprimir un Alpha Tauri con el que acabó 13º en Hungría y 16º en Spa, donde en el esprint fue 11º. También habrá carrera corta en Austin, pero el australiano no espera encontrar un panorama muy diferente al que había cuando llegó su baja: “El coche actual ha avanzado un poco desde la última vez que lo piloté, pero el simulacro me sirvió para hacerme una idea de lo que han aportado los cambios y las actualizaciones. Sentí un poco su efecto, pero es una de esas cosas que creo que, una vez en pista, las sentiré en todo su esplendor. Estuve allí en Singapur cuando lo probaron por primera vez, y fue interesante escuchar las reacciones y los comentarios, que en su mayoría fueron positivos. Así que estoy deseando ver cómo es de primera mano. En cuanto a este fin de semana, siempre me ha gustado Austin. Es un circuito único para los tiempos que corren, y las ondulaciones y los baches hacen que sea físico. Te machaca, pero creo que eso me gusta. Me gusta el desafío. Muchos de los vértices son bastante anchos, así que hay algunas curvas peculiares que hacen que la pista sea excepcional y destaque”
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