Los campeones adelantan así

Piastri hizo que pareciera sencilla la maniobra que diferencia a los buenos pilotos de los elegidos. Tuvo una hora y media de pesada suspensión antes de la carrera por culpa de la lluvia, y la prudencia de la FIA, para visualizar el adelantamiento del año. La salida lanzada beneficiaba a Norris, que no tendría que defender la pole bajo los semáforos, pero el australiano se pegó a la trasera del otro McLaren en La Source, no se amedrentó por la estela de agua y aguantó el tirón de camino a Eau Rouge. Se lanzó por fuera como lo hacen los pilotos valientes y cerró el adelantamiento sobre Lando en Les Combes con una ejecución milimétrica. Como había sufrido en sus propias carnes un día antes contra Verstappen, pero con la dificultad del asfalto mojado.

Así se puso primero, como lo hacen los campeones, y ya no dejaría de serlo en la clásica carrera de carril seco, cambio de neumáticos obvio y escasos adelantamientos. Norris, segundo, perdió algo más que siete puntos este fin de semana. Y un muy digno Leclerc completó el podio delante de Verstappen. El Ferrari y el Red Bull conformaron un bonito tren junto al Mercedes de Russell (5º) con varias intentonas, sobre todo de Max contra el monegasco. Pero no fue suficiente, era muy difícil rebasar a un SF-25 muy ligero de alerón trasero. No era día para fantasear con adelantamientos, por eso tiene tanto mérito la remontada de once posiciones de un gigante Hamilton, con un primer ‘stint’ memorable aún con las gomas intermedias. Sobrepasó a Sainz, Colapinto, Hulkenberg y Gasly, clavó el cambio a ‘slicks’ y solo se atascó con Albon (6º).

Los pit-stop para montar neumáticos de seco llegaron en torno a la vuelta 13, así que la degradación fue intensa en una carrera de 44 pasos por meta. Norris pasó por el garaje una vuelta más tarde que Piastri por cuestiones logísticas, no se puede parar a dos coches a la vez, así que escogió un neumático duro en vez de medio para tratar de llegar en mejores condiciones al final. Sus tiempos fueron ligeramente más sólidos, pero insuficientes para acercarse a menos de tres segundos. La presión final de Verstappen tampoco fue suficiente contra un calculador Leclerc. Para entonces Russell se había descolgado hasta 13 segundos, porque el Mercedes parece un gran coche, pero no lo es.

Nada que rascar para Alonso y Sainz

Alonso (17º) se pasó toda la carrera en un tren de DRS, ganó alguna posición con su temprana parada (era 13º) y después arriesgó con una segunda que no dio resultado a quienes lo intentaron. Tampoco a Sainz (18º). Ambos partieron desde el ‘pit-lane’ apostando por reglajes de lluvia, pero la FIA tardó tanto en dar la salida que para entonces todos los frentes habían cruzado el bosque de las Ardenas. Se hace así por seguridad, Jules Bianchi no perdería la vida en una carrera de lluvia en 2025. La cantidad de agua que cayó entre las 14:30 y las 15:00 dificultaba enormemente la visibilidad, de ahí el retraso. No fue perfecto, pero Piastri compensó a los 130.000 aficionados que acudieron a Spa este domingo con un adelantamiento que sí lo fue.