“El equipo está contento pero yo no estoy aquí para ser segundo”

Pérez logró en Arabia su quinta victoria en la Fórmula 1 (el primero desde la pole), la primera justo por delante de Verstappen, y cerró además el póker de triunfos en circuitos urbanos: Bakú, Mónaco, Singapur y ahora Jeddah Corniche. “Con el coche de seguridad me recordó a Yeda el año pasado, pero ya habíamos parado así que fue una carrera nueva. Max llegó pronto y hasta el final estuvimos asegurándonos de que manteníamos una ventaja segura. Estábamos empujando bastante fuerte para mantener ese hueco. ¿Divertido? Yo me lo he pasado bien en esta carrera, sobre todo al final, empujándonos con los tiempos por vuelta. Décima arriba y abajo, fue bastante intenso hasta que nos dijeron de mantener el ritmo, y luego apretar”, explicó.

Su triunfo fue implacable, contuvo la presión de Verstappen con cinco segundos de renta, pero hay espacio para la polémica: el equipo le dijo que tenía la vuelta rápida pero en la última vuelta se la quitó Max, y ese punto le da el liderato al neerlandés. “Pregunté a dos vueltas del final y me dijeron que la tenía yo. Pensaba que la comunicación sería la misma para Max, pero recibí una información diferente y no pude apretar hasta el final. Lo hablaré con el equipo”, cuestionó Checo.

Sobre su salida, le pasó Alonso: “No tuve una buena arrancada, hay que trabajar con los ingenieros para asegurarnos de que lo corregimos. Fernando tuvo una mejor salida pero sabía que no era el final del mundo, la carrera dura 50 vueltas. Gestioné mis neumáticos, no me volví loco e hice mi carrera”. Dijo Horner que es su mejor carrera en la F1. “Es difícil juzgar. La carrera fue sólida, la gestioné bien. Hicimos un gran trabajo pero no sé si es mi mejor fin de semana con el equipo. Melbourne será mejor”, sentencia el mexicano de 33 años.

“Hay que asegurarse de que los dos coches son fiables”

Al otro lado del garaje del ganador, se vio a un Verstappen descontento. No tanto por el triunfo de Checo (aunque no repartió ni medio elogio hacia Pérez durante la rueda de prensa), sino por los problemas de fiabilidad que lastraron a su Red Bull en la clasificación del GP de Arabia. “No es solo el ritmo del coche, debemos asegurarnos de que somos fiables. Mi primer fin de semana (en Bahréin) no fue limpio, con cambio de balance entre los test y la carrera y más cosas que había por detrás. Aquí remonté hasta el segundo tras el problema de clasificación. El equipo está contento pero yo personalmente no estoy contento porque no estoy aquí para ser segundo. Me gusta remontar, no me importa, pero cuando luchas por el título y parece que está entre dos coches, hay que asegurarse de que los dos coches son fiables”.

El neerlandés subrayó que levantó en las últimas vueltas por temor a los problemas de fiabilidad: “Siendo realista, sin el coche de seguridad el segundo puesto era el resultado más alto posible. En las primeras vueltas era difícil seguir a los coches con curvas tan rápidas, tienes un efecto de viento de cola y el coche se va para todos los lados. Después de varias vueltas pude adelantar de uno en uno. El ritmo era bueno y el coche de seguridad me ayudó, pero ya había perdido mucho tiempo con Checo. Cuando era segundo era una desventaja importante. Intenté ir a por ella, pero notaba vibraciones en el tren trasero, en el eje, y estoy seguro de que había algo. En ese punto eché cuentas y no habría sido capaz de cerrar la desventaja con Checo. Es importante conformarse con el segundo y no tener problemas con el coche”. Ahora Max no descarta luchar por el título exclusivamente contra Pérez: “Si ese es el caso es muy sencillo, podemos pelear y ganará el mejor”.