“Cogeré el azul de Williams, no nos gusta el rojo de Ferrari…”
El argentino juega con plastilina, Sainz se viste de pimiento, Norris se queja por unas clases de padel... Así es el amigo invisible de los pilotos de F1.
No hay que esperar mucho más. Esta noche Papa Noel recorrerá el mundo repartiendo regalos y en la mañana del miércoles muchos niños (y adultos) serán felices abriéndolos. Sin embargo, hay quienes han recibido ya algunos, como es el caso de los pilotos de Fórmula 1 en una de sus tradiciones de cada año por Navidad, la del amigo invisible. Además de despedirse del asfalto hasta el año que viene, durante los grandes premios de Qatar y Abu Dhabi los pilotos se repartieron sus regalos y hubo de todo y para todos los gustos.
Por ejemplo, hubo quien lució su regalo ese mismo fin de semana, como le pasó a Carlos Sainz, quien recibió de Zhou un traje de un pimiento rojo en honor al apodo con el que se le conoce al español, Chili, e hizo una promesa: “Si suma algún punto con el Sauber, me lo pongo y me hago una foto con él”. Dicho y hecho. Porque el chino fue octavo en Qatar y Sainz cumplió lo prometido en Abu Dhabi. Incluso en un momento tan emotivo como el de su despedida de Ferrari, se puso el traje y se fotografió con Zhou antes las risas de todos.
Siguiendo con Sainz, por su parte regaló a Colapinto un puzle y unas plastilinas. Lo suficiente para que el argentino fuera el que más juego diese con ello en el vídeo de la F1. Y es que se puso a montar un coche de F1 con mensaje incluido: “Cogeré el azul y el naranja para hacer un Wiliams, no nos gusta el rojo de Ferrari (lanza los de ese color). Estamos haciendo el coche de Carlos del próximo año. Las rojas están allí (en el suelo), él no ya no lo necesita más para el Ferrari, creo que va a estar contento con este”.
También fueron divertidos los regalos a Norris, unas clases de pádel por parte de Russell que indignaron al de McLaren: “¿Es solo esto? Clases de pádel... ¿De quién es? Porque si es de Lance (Stroll) o Fernando (Alonso), lo entiendo porque son mejores que yo, pero si es de cualquier otro... ¿George? Le gané el otro día. Se lo devolveré a Santa”. Y el que Bottas le hizo a Albon: un peluche de un oso panda y una postal navideña con una imagen del finés desnudo de espaldas. “Cuando me quite el casco estaré pensando en tu culo”, dijo entre risas.
Esta vez, no se apuntaron los pilotos de Red Bull, los de Haas, Hamilton y Alonso, y entre el resto de regalos hubo más clases de pádel (para Piastri), coches de radiocontrol, camisetas, objetos varios y libros, como el que Lawson le dio a Russell sobre cómo ser modelo junto a una pulsera. “No creo ni que lea el libro ni que me ponga la pulsera...”, bromeaba el británico de Mercedes. Seguro que no será el único que diga algo parecido en estas fechas…
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