Aleix se disculpó personalmente con Binder, y sin problema
“Fui a su box directamente después de la carrera. Me ha dicho que no me preocupara, que son lances de carrera y ya está”, dice.
El día en el que se cumplían 30 años de la primera carrera de su vida, en enduro, siendo un crío de cuatro años, Aleix Espargaró tuvo una de esas actuaciones para olvidar de un piloto, una especie de tierra trágame que se vive siempre que uno se cae y además se lleva con él al suelo a un compañero de parrilla. Al de Aprilia le sucedió en el esprint de Indonesia, en la curva 16 de la segunda vuelta, cuando marchaba sexto, y en su caída provocó también la de Biner. Lo primero que hizo a la hora de dar la cara con los periodistas fue disculparse con el de KTM, algo que ya había hecho a título personal, visitándole en el box.
“Pedirle disculpas a Brad. Me he caído y le he arrastrado, y poco he podido hacer. Me encontraba muy cómodo y no quería perder el tren de la carrera. La esprint es muy corta y hay que adelantar rápido, y me he precipitado. Pero son las carreras. He ido a su box directamente después de la carrera. Me ha dicho que no me preocupara, que son lances de carrera y ya está”, empezó diciendo el catalán, para añadir: “Sí, estaba viendo que por delante Jorge estaba recuperando, que Maverick se estaba yendo, y me he encontrado bien y quizá me he precipitado”. Todo vino provocado por una mala salida, de tercero en la parrilla a sexto tras la primera curva: “En la salida he tenido algún problema con el embrague, no acabo de salir demasiado bien”.
Sobre la caída, tenía claro el motivo: ”El problema es que tenía la posición para entrar. Brad estaba delante y podía hacer su trazada, pero Brad ahí ponía la moto recta y cerraba mucho, no iba a la línea que yo esperaba que iba a ir, redonda por fuera. Me he quedado por la parte sucia y no ha habido más”.
La acción se revisó por el Panel de Comisarios, pero esta vez entendieron que era un lance de carrera, algo normal para Aleix: ”Nunca sabes lo que puede pasar. Es difícil entender la reacción de los comisarios. En cada ocasión puede haber una cosa distinta. Viendo la repetición, yo ya estaba en paralelo y estaba adelantando. Me sabe muy mal por Brad, pero se me he cerrado la dirección y le he arrastrado. Creo que está bien, al final no es una acción peligrosa. No le he chocado, me he caído y la moto le ha arrastrado. Me sabe muy mal, es una lástima y he arruinado su esprint, pero creo que está bien decidido”.
El de Aprilia es de los que más ganas tiene de que llegue la carrera, a las 9:00 en horario peninsular: “El objetivo es intentar ganar. Creo que tenemos ritmo como los mejores. De hecho, después de la caída he hecho dos vueltas en 1:31.0 y he decidido parar para no dañar mucho el motor, porque no tenía mucho sentido, pero la velocidad está ahí y mañana lo intentaré otra vez”. Y sobre tanta caída como se vio, analizó: “No te puedes salir ni un milímetro de la trazada, porque si te sales de la trazada, está muy sucio. Eso por un lado. Y por otro, hay 60 grados de asfalto. Los neumáticos hacen lo que pueden, pero hay mucha temperatura”.
El calor pasó factura la semana pasada a los pilotos de F1 en Qatar y a los de MotoGP en India. Al preguntarle a Aleix si son muchas vueltas las 27 programadas en el circuito de Mandalika, dejó claro que él no tiene problema con eso: “Al final, es muy personal. No te engaño: yo podría hacer 40, sinceramente. Te lo digo de verdad, podría hacer 40 vueltas. Pero cada uno entrena lo que entrena. Luego, puedes entrenar lo que quieras, que hay cuerpos que toleran mejor el frío que el calor. Quizá yo me desgasto más con frío que con calor. Yo no sufro tanto aquí ni sufría tanto en la India, pero es cierto que las condiciones no son fáciles”.