A Palou solo le separa Dixon del título

La primera bola de partido del campeonato de la IndyCar 2023 era para Álex Palou en el óvalo de Gateway, marcado de inicio por la lluvia en la clasificación que dejó al español quinto, pero con nueve puestos de castigo por cambio de motor, lo que le hizo partir 14º. Y entre medias de los aspirantes al título, Scott Dixon, decimosexto de salida por penalización, y Josef Newgarden, desde el primer lugar heredando la pole del también sancionado McLaughlin. No hubo título para el español, pero le quedan dos match ball y el asunto queda en un mano a mano contra Dixon, porque Newgarden, cuando luchaba por su quinto óvalo del año, se descartó a 47 del final cuando tocó el muro y dijo adiós al triunfo y al título.

Y sobrevive Dixon por una estrategia descomunal de Ganassi, otra vez. Como en Indianápolis, la carrera precedente. El neozelandés se ahorró dos paradas en el World Wide Technology Raceway que le valió la victoria, acompañado por O’Ward y Malukas en el podio. Palou acabó 7º y ahora su ventaja en la general sobre su compañero es de 74 puntos, cuando quedan 108 en juego, dos carreras, en dos circuitos ‘ruteros’.

Fue una carrera tranquila en líneas generales en su primera mitad, marcada por una amarilla intrascendente provocada por Pedersen muy al principio y otra en la vuelta 124 causada por Sato que fue la clave para Dixon, que marchaba con una estrategia ligeramente ‘alterada’, estirando más que nadie los blandos. Y que fue el gran beneficiado, ya que parecía descartado y salió primero, ahorrándose una parada.

En la segunda mitad vino el error de Newgarden, la gestión de Dixon para acabar con tres paradas por cinco del resto de favoritosy el ejercicio de supervivencia de Palou en un terreno poco favorable para él para acabar séptimo. Pero la ventaja para llegar a la Copa Astor es solvente. Si cede menos de 20 puntos en Portland, será campeón.

Así queda el campeonato a falta de dos carreras.