FÓRMULA 1

La FIA se aplica: estudian cómo poder tomar mejores decisiones

Tras ser objetivos de tanta crítica por las sanciones que aplican en carrera, los comisarios buscarán más consistencia al penalizar.

MAXIM SHEMETOVREUTERS

Cada vez que ocurre un incidente en la pista están en el punto de mira de aficionados, equipos y de los propios pilotos. Con el paso de los años, la FIA se ha labrado una mala reputación en cuanto a las decisiones que toman los comisarios durante las carreras. Sanciones injustas, tardías, escasas, inconsistentes, desproporcionadas… Hay de todo. El momento más crítico del año se vivió en el polémico GP de México con los dos cambios de podio o la sanción que se llevó Verstappen y no Hamilton por una idéntica maniobra.

Todo eso ha llevado a la FIA a replantear su sistema y a intentar mejorarlo. "Pasamos por muchas reglas y miramos cómo podemos trabajar para ordenar el texto y tomar decisiones más rápidas. Hablamos mucho sobre cómo podemos lograr una mejor consistencia. Creemos que son necesarias más reuniones y revisiones de decisiones pasadas para entender cómo tratar una situación particular, especialmente cuando hay que tomar una decisión subjetiva", explica Garry Connelly, presidente de los comisarios tras la reunión que tuvieron en Viena.

Al cambiar de comisarios cada carrera, deben tener todos una base clara sobre la que aplicar sanciones de forma igualitaria. "Miramos un sistema que la DMSB (la Federación Alemana) utiliza para revisar las carreras. Los comisarios se reúnen para repasar incidentes y discutir las decisiones tomadas. Pensamos que podría ser bueno hacer eso cada tres o cuatro carreras", asegura que Conelly, que pone el foco en las zonas más expuestas a la polémica: "Hay solo 11 o 12 curvas en todo el año en las que existe el potencial de acortar de manera muy obvia".

Una trampa de grava es la solución que proponen muchos pilotos para evitar problemas en esos giros, pero la FIA toma Monza como ejemplo: "Hay soluciones que pueden ser adoptadas, como la de la primera curva en Monza. Eso hace que sea mucho más fácil para los comisarios porque el castigo se aplica en la pista. Además, eliminaría subjetividades como decidir si un piloto gana la suficiente ventaja como para sancionarle". "Tratamos de lograr coherencia. Siempre podemos mejorar e intentaremos hacerlo", afirma Conelly. A ver si lo consiguen.

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