“Las asistencias le movieron como a un trozo de plástico”

Primero fue la caída, el impacto con la BMW de Marco Melandri, lo que hizo a Carlos Checa rodar por los suelos. Después, el susto: el piloto español quedaba tendido sobre el césped, boca abajo, inmóvil, mientras Melandri corría hacia él para socorrerle. Finalmente, el traslado al hospital de Melbourne y las buenas noticias: el TAC no revela lesiones, aunque Carlos deberá permanecer en observación durante 24 horas.

Una vez recuperados, hay que echar la vista atrás, al accidente en sí, y a dos reacciones: la del responsable de la Clinica Mobile, el doctor Massimo Corbascio, y la de Melandri, testigo directo de lo sucedido. "Carlos responde, no tiene dolores en particular en ninguna parte de su cuerpo, pero no recuerda nada del accidente. Lo trasladamos a Melbourne para un chequeo y no disputará la segunda carrera. Cuando llegó a la clínica me dijo que no recordaba nada, así que es obvio que sufrió una pequeña conmoción cerebral. Pero Carlos tiene un físico excepcional, así que espero que todo vaya bien y podamos verlo en España, en las carreras de Aragón", afirmaba el doctor Massimo Corbascio, jefe de la Clinica Mobile de WSBK, en los micrófonos de ‘Italia 1’.

Más sorprendentes son las palabras de Melandri, quien no oculta su enfado por el modo de actuar de las asistencias del circuito de Phillip Island: "No sé lo que pasó con Carlos, escuché un ruido muy fuerte, me caí y tuve miedo, pensé que me había roto el hombro. Me he sometido ya a cuatro operaciones, así que sé perfectamente la dinámica de los huesos y los tendones. Sin embargo, la primera preocupación no era por mí, sino por Checa. Estaba inmóvil sobre la pista, tenía la vista perdida pero respiraba. El personal de socorro lo ha movido como un trozo de plástico, cargándolo en la camilla de manera poco ortodoxa. No es así como debería hacerse. Eso me ha enojado, pero ha servido de poco".