Alonso asombra con una brillante cuarta plaza

"Es asombroso, asombroso". Resoplando, impresionado después de la calificación, Denis Chevrier, jefe de motores de Renault en los circuitos, felicitó al mánager de Fernando Alonso por la excepcional cuarta plaza del asturiano en la parrilla: "Sabemos que tenemos al mejor piloto y lo ha vuelto demostrar". Con el ordenador portátil en la mano y una sonrisa de oreja a oreja, se metió en la habitación de los ingenieros para revisar por dónde había pasado la estrella española para batir a un Ferrari (Massa), un BMW (Heidfeld) y un McLaren (Kovalainen), tres pilotos con coches superiores.

Pero ahí está la gesta. En una pista que ayer era de patinaje debido al asfalto que se está despegando y a las cañitas de caucho que sueltan los neumáticos, el ovetense echó mano de su talento y supo sacar ventaja sobre los pilotos que arriesgaron en exceso. Sólo había una estrecha zona limpia por la que pasar. Además, la estrategia es buena y Alonso deberá parar por primera vez en la vuelta 23, dos más tarde que los dos pilotos de la primera fila de la parrilla.

Con previsiones de lloviznas intermitentes para hoy, cualquier cosa es posible para el asturiano, desde el podio hasta terminar séptimo. En la segunda fila de la parrilla acompañará a Raikkonen, tercero con más combustible, previsiblemente, que los coches de la primera fila que ocupan Kubica y un descargado Hamilton. El británico consiguió, en cualquier caso, una brillante pole, arrebatándosela en el último intento al piloto polaco de BMW. El trazado canadiense le gusta mucho al inglés y se adapta a la perfección a su McLaren. Pero deberá cuidarse especialmente del ritmo de Kimi con el Ferrari. Sin embargo, si el vigente campeón no pasa pronto al BMW, la victoria se le puede esfumar en el primer stint de la carrera.

La segunda fila de Alonso se cimentó desde el viernes. A la chita callando, el ovetense ha probado con mucho peso todo el fin de semana para preparar la calificación. En la última tanda de libres de ayer habría logrado el mejor tiempo de no tener una bandera amarilla en su vuelta buena. De esta forma ha acercado el monoplaza casi a los niveles del vueltón de Barcelona, a sólo 4,4 décimas a igualdad de peso de Hamilton.

Otra cosa puede ser la carrera, aunque la lluvia (hay un riesgo del 60%) puede hacer saltar por los aires todas las previsiones de los ordenadores. No ha ido de farol, porque terminó quinto en la Q1 (sólo con un intento) y cuarto en la Q2. Como ya sucediera con sus anteriores Renault, el R28 ha rendido mejor de lo esperado en Montreal con el kit de baja carga, aún a costa de que sus pilotos se jueguen el tipo en las curvas. Fernando tiene la quinta velocidad punta en liza, con 316 km/h.

Ese riesgo le ha servido al asturiano, pero no a Piquet que ha vuelto a quedarse fuera de la Q3. Sale decimoquinto y tiene la moral por los suelos. El coche está entre medias de ambos. Eso sí, al bicampeón le vino bien el accidente de Webber, que luchó contra él a brazo partido en la Q2. Sale décimo y, aunque irá a una parada seguramente, ahora está bastante más lejos. Brillante calificación también de Rosberg y discreta de Massa, que no se ha sentido cómodo en una pista tan deslizante.