Riven: The Sequel to Myst

Riven: The Sequel to Myst

Riven: The Sequel to Myst

Maldita sea! Acabo de llegar a la isla, y ese tipejo vestido a la moda imperio austrohúngaro me roba el libro... y luego llega el otro payaso disfrazado, se lo carga, se lleva el libro y desaparece... ¿qué hago yo ahora?

Si seguís caminando llegaréis hasta un túnel, tras el cual aparece un larguísimo puente que os conduce hasta la isla de la gran cúpula. Pero por el momento, hay que regresar a la encrucijada de tres pasillos, al otro lado de las puertas metálicas del balcón.

Es menester llegar hasta el fondo del pasillo, donde hay un extraño mecanismo, cuya alimentación de energía es una tubería de vapor [¿será la misma tubería de vapor que asciende desde el lago, y que es abierta por la espita giratoria del centro del lago? Sí]. Abrid la esfera. Coged un poco de alpiste del bote de la derecha, y colocadlo en el centro de la bandeja. Dejad la esfera abierta y dadle a la palanca. Esperad hasta oír que se cierra. Dadle a la palanca y abrid la esfera. Fijaos en la rana... escuchad lo que dice... que sí, hay que escuchar atentamente.

Una vez os hartéis de examinar la rana, mirad hacia arriba. Hay un ventilador, que si habéis pulsado el interruptor que os dije estará apagado. En ese caso, meteos a través de él por otro tubo y seguidlo... estaréis dentro del laboratorio, la casa a la cual antes no podíais entrar. Desde aquí, abrid la puerta que conduce al camino por el que pasasteis antes, pero volved a entrar. Hay que localizar un par de cosas, ambas en una de las tres mesas, justito la que está encima del tubo.

Primero, fijaos en que hay otro ojo de esos, anotad el signo. Luego, hay un libro, que resulta ser un diario del mismísimo Gehn. Leedlo y tomad muchas notas, que os van a hacer falta más tarde. Hay otra puerta que conduce al exterior: abridla y os encontráis con otro funicular.