Rahm pesca en la lluvia de Augusta

+Tormenta se anunció y tormenta hubo. La segunda jornada del Masters de Augusta quedó interrumpida este viernes en su turno vespertino por meteorología desfavorable. Fue un gatillazo en principio breve, el más corto de la historia. Ni 20 minutos estuvieron evacuados del campo los jugadores, entre ellos un Jon Rahm que esta vez fue de los últimos en salir. El vizcaíno marchaba al par antes de esa primera suspensión y se procuró dos birdies entre el bocinazo inicial y el segundo, el definitivo. Se acostó segundo con -2 para -9 tras los nueve primeros hoyos. Por delante un fin de semana en un clima que conoce de sobra de su niñez en Barrika, en su salsa. El juego se retomará este sábado a las 13:30.

Aún a trompicones, Rahm se mantenía en el vagón de cabeza en un día en el que brilló madrugador Brooks Koepka, estandarte del LIV, que por primera vez en mucho tiempo está realmente sano y exhibe en Georgia (EE UU) el ‘modo cyborg’ con el que ganó cuatro majors (dos US Open y dos PGA) entre 2017 y 2019. En su última aparición previa al Masters en la superliga saudí, en Orlando, su Florida natal, se llevó su primer triunfo desde 2021 y tras 36 hoyos del Masters luce un imponente -12, tarjetas de 65 y 67 golpes mediante. Un bogey el jueves y ninguno ayer. Lidera en casa club con la sensación de que este sábado la cita se puede convertir en un mano a mano entre él y Rahm.

Detrás de los dos purasangres destacó Sam Bennett, la sensación de esta edición. Campeón del US Open Amateur en 2022, ya pasó el corte ese mismo año. Ha tirado 68 golpes (-8) dos días seguidos en su primera toma de contacto con Augusta y se ha dado una oportunidad inmejorable de ser el primer campeón aficionado del torneo. En el improbable caso de que lo consiga, no cobraría los 2,7 millones de dólares (2,4 de euros) reservados al ganador, pues su condición no profesional lo impide.

Sergio García, al borde del KO

Difícilmente jugará las dos últimas rondas Sergio García, que el jueves se reconocía desordenado en lo mental y que tiró +3 para +5 en 14 hoyos. Insuficiente con el corte proyectado en +2. Seguro se quedarán fuera DeChambeau (+4), McIlroy (+5), Willett (+6), Oosthuizen (+3 para +7 en 17 hoyos) y, entre los veteranos, Langer (+5), Olazábal (+10), Larry Mize (+5 para +12 en 16) y Sandy Lyle (+10 para +19 en 17), los dos últimos en su año de despedida. Grata sorpresa en este último capítulo la de Freddie Couples, uno de los swings más elegantes de la historia, que se regaló 36 hoyos más a sus 63 años con un +1 para par tras 17.

Camino de ello iba Tiger Woods, par para +2 en 11. Otro frenado el seco por unas inclemencias meteorológicas que llegaron a provocar la caída de varios árboles sobre zonas cercanas al público. No hubo que lamentar heridos, sí un retraso que, si este sábado es tan feo como se presenta, puede acabar desembocando en un desenlace pospuesto al lunes. Algo que solo ha ocurrido en cinco ocasiones desde que se empezó a celebrar el Masters en 1934. Guiño a Rahm: la última vez, el campeón fue Seve.