Un choque de cabezas sentencia el Nacional del superpluma

Un desenlace que nadie esperaba en la sala Razzmatazz de Barcelona. Era uno de los combates más esperados a nivel nacional, enfrentando a dos grandes nombres, pero el cinturón de campeón de España del peso superpluma se quedó sin dueño tras un nulo técnico en el primer asalto del combate entre el local Cristian Eusse (8-0-1, 6 KO) y Carlos Ramos (17-3-1, 10 KO) en la velada organizada por la mítica promotora Gallego Prada. “Ha sido como un shock. No me esperaba que por ese corte fuesen a parar la pelea y me he quedado impactado. Me ha dejado desconcertado”, reveló el boxeador de origen colombiano a AS.

El público se vino arriba cuando llegó el turno del Campeonato de España del peso superpluma. Las salidas fueron aclamadas por los asistentes, con ganas de ver el que prometía ser uno de los encuentros del año en nuestro país. Ambos púgiles empezaron estudiándose, con respeto, moviéndose por el centro del ring. Eusse marcaba con el jab y se atrevió a lanzar las primeras manos, mostrando que tenía intención de hacer daño. Ramos cabeceaba, quitándose los golpes y atacando al cuerpo. Pero todo terminó con un choque de cabezas involuntario que provocó un corte en el cuero cabelludo del boxeador afincado en Madrid. El médico le revisó y dictaminó que no pararía de sangrar, por lo que el árbitro paró el combate.

Los aficionados se quejaron ante la decisión arbitral, que había sentenciado el combate en los primeros compases. Pero esto no quedará así. Eusse y Ramos volverán a verse las caras pronto para pelear nuevamente por el cinturón. “Cristian nos vemos, y vamos a hacer una buena pelea”, aseguró el boxeador de origen ecuatoriano cuando terminó el encuentro. “Yo me estaba viendo bien, tenía buenas sensaciones, pero son cosas del boxeo, accidentes que pasan. Vamos a intentar recuperarnos y ver si se puede hacer otra vez esta pelea. Yo quería seguir, pero yo no tomo esas decisiones, las toma el médico y eso es responsabilidad de él. Ha tomado esa decisión. Tengo muchas ganas de hacer la pelea y que la gente disfrute del evento”, comentó Ramos a AS tras la curación.

Para Eusse el combate no tendría que haberse parado. “Yo, la verdad, no creo que haya estado bien parado. Al ser un corte en la parte superior, no es en la ceja ni en el ojo, es en la frente por arriba, yo creo que esa pelea se podría haber alargado más y ya durante los asaltos, el árbitro podría haber parado y que el médico lo hubiese mirado otra vez. Yo he visto peleas más graves que han seguido más para adelante. No me parecía un golpe peligroso”, aseguró el de Gallego Prada. A pesar del poco tiempo que duró el encuentro, el boxeador de origen colombiano se sentía cómodo en el ring. “Me estaba viendo bien para lo que estaba durando la pelea en ese momento me veía que tenía bien pillada la distancia, que la estaba trabajando bien y que él no conseguía llegarme. El plan va a seguir siendo el mismo porque el que tenía, lo estaba empezando a usar y he visto que funcionaba”, reveló.

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