Serena Williams el “Princesa” que reivindica la igualdad salarial en el deporte

Sale del hotel para recibir los flashes de las cámaras y rompe el protocolo con un improvisado bailecito al son de las gaitas. El gesto más viral del día desde Oviedo. A Serena Williams (Saginaw, Estados Unidos, 1981) se le ve feliz por la capital asturiana en las horas previas a recibir el Premio Princesa de Asturias de los Deportes, que da lustre al galardón. Un premio que, cuenta, captó su atención el día que lo recibió Meryl Streep y que ahora confiesa “nunca pensé que me llegaría”. Hoy lo recibe a las 18.30 horas en el Teatro Campoamor de Oviedo.

Serena Williams es una de las tres reinas, junto a Graciela Iturbide (Artes) y Mary-Claire King (Investigación Científica y Técnica), dentro de los ocho galardonados en esta edición de los Premios Princesa de Asturias 2025. Sucede a otra guerrera de las pistas, Carolina Marín. Parece lógico, y encaja con su versión más reivindicativa, que parte de su discurso en Oviedo girase en torno al papel de la mujer en el deporte.

“Siempre me ha importado el legado que dejaría al margen del tenis. Y siempre me ha parecido muy importante la igualdad salarial. Cuando comencé en esto me esforzaba y trabajaba tanto como cualquier otro hombre y no tenía por qué ganar menos dinero. Una parte importante de mi misión era acudir a los Grand Slams en los que no se pagaba lo mismo, para tratar de entender el porqué y para responder que merecíamos cobrar lo mismo porque trabajábamos igual de duro”, expresó ante los medios.

“Para mí ha sido una lucha muy importante, así como alzar la voz por el futuro, porque como deportista tu carrera puede ser muy corta. Espero que todo lo que estamos haciendo sea un trampolín para las siguientes generaciones”, completó.

En su intervención, la tenista lanzó halagos para Carlos Alcaraz —“soy fan incondicional, siempre le llamo para decirle que le apoyo en sus partidos”— y para abrirle la puerta a un nuevo récord de Grand Slams: “Todo es posible, Alcaraz es muy joven…”.

Baño de masas

Tras someterse a las preguntas de los medios, la pequeña de las Williams disfrutó del resto del día en la capital asturiana y se mezcló con la gente en una amena charla de tarde a la que asistieron más de 2.000 testigos. Conducida por Theresa Zabell y Feliciano López, Serena relató los entresijos de su carrera, volivó como por la mañana a subrayar el rol de su padre como formador, y cómo había logrado llegar a ser la tenista más laureada de la historia. Y, a partir de hoy, también una Princesa del Deporte.

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