Paquito Navarro y Di Nenno se despiden con una victoria majestuosa

Paquito Navarro y Martin Di Nenno y Gemma Triay y Alejandra Salazar, dos parejas a las que entrena el mismo técnico, Rodrigo Ovide, levantaron los trofeos del Open de Santander. Era la segunda vez que el argentino hacía doblete, y que no parece que vaya a conseguir en los que resta de temporada porque los hombres han tronchado definitivamente su relación y de la mejor manera posible: ganando su segundo torneo del año de una forma superlativa, con una victoria majestuosa ante Belasteguín y Coello, otra pareja a la que les resta poco recorrido.

“Es para mi un honor despedirme así de Martín, con un título y frente a Belasteguín en la final” decía Paquito Navarro al final del partido, al lado de un emocionado Di Nenno, con los ojos aún vidriosos y las mejillas húmedas, del sudor del partido y de las lágrimas vertidas. Pocas rupturas se han vivido en el pádel con tanta emoción como esta, que no ha alcanzado los dos años de existencia, y, sin embargo, parece una dupla que trasciende al tiempo por lo que ha calado entre los aficionados.

Además, porque en Santander ha vuelto a ser la pareja del año pasado, osada, ambiciosa, alegre, dominadora, hábil, astuta, imparable, imprevisible. No son adjetivos regalados o gratuitos, que se los han ganado en la pista: 6-1 y 6-1 frente a Stupa y Lima (la pareja número cinco), 6-1 y 6-1 ante Sanyo y Tapia (la pareja número dos) y hoy 6-2 y 6-0 ante Coello y Belasteguín (la pareja cuatro) que aparecia con dos torneos ganados consecutivamente, 13 victorias. Cuando se vence con esa autoridad a los mejores (sólo les han faltado Galán y Lebrón, eliminados en las semifinales) no queda más remedio que rendirse a la evidencia de una pareja que no comete errores, que no regala puntos, que ataca y que defiende con un espíritu indomable lo que multiplica su calidad. Dejar a Belasteguín con 6-0 en el segundo set homologa aún más esta victoria para que pase a las clásicas del pádel.

Antes de que pasase todo eso, en la final femenina, entre las nuevas número uno, Ari Sánchez y Paula Josemaría, y las que lo fueron hasta hace dos semanas y ahora son las número dos, Gemma Triay y Alejandra Salazar, pasó que Gemma y Ale dieron manotazo en la mesa, un estamos aquí y queremos lo que es nuestro, porque tras cinco torneos sin ganar, a la sexta levantan otro, el octavo del año, y saben que aún hay tiempo de recuperar el reinado en 2022.

Ganaron Salazar y Triay 6-2 y 6-1, pese a empezar con un 0-2., Encadenaron un 8-0 de juegos consecutivos, con Alejandra Salazar siendo mortífera con su derecha erosionado una y otra vez la defensa de Paula Josemaría, y con Gemma superando en el cruzado a Ari. Con esta victoria son 16 en finales las que han consechado juntas en dos años, y la temporada aún continúa.