Leslie Romero, la primera Spider-Woman española

En Tokio, Alberto Ginés sorprendió a España y al mundo convirtiéndose en el primer campeón olímpico de escalada. Tras su éxito, por la similitud obvia, los titulares le bautizaron como el Spiderman nacional. Este año, en París, el superhéroe también tendrá a su superheroína. Leslie Romero, a sus 26 años, será pionera por partida doble. Por un lado, se convertirá en la primera representante española en escalada; por el otro, estrenará la modalidad de velocidad. En Japón, el deporte sólo repartió un oro y lo hizo a través de la combinación de las pruebas de velocidad (speed), bloques (boulding) y dificultad (lead). Esta vez, bloques y dificultad, con el propio Ginés como candidato, y velocidad irán por separado. Allí, desde este lunes (13:00), estará Romero.

“Yo firmaría pasar a la final y estar dentro de las primeras ocho y luego una vez allí ya veremos que pasa, porque la velocidad es una modalidad bastante impredecible”, dice la española en París, donde, como tantos otros, está “cumpliendo un sueño”. El suyo empezó cuando tenía seis años y probó la escalada en su Venezuela natal. Su historia, en muchos puntos, se entremezcla con la de Erik Noya, con el que comparte entrenamientos en el CAR de Sant Cugat, que nació en Caracas y emigró a Madrid huyendo de la crisis. Ella, de padre malagueño, con la doble nacionalidad desde siempre, creció en San Juan de los Morros y también se marchó por problemas económicos.

Para poder seguir con su carrera, en Venezuela, Romero se autofinanció de mil y una formas. Desde minar criptomonedas a cocinar y vender dulces por la calle. Cuando llegó a España, sin embargo, las cosas tampoco fueron como esperaba. Al menos, de inicio. Debido a problemas burocráticos, en los que la federación venezolana puso mucho de su parte, Leslie, que ya había competido con su país de origen, estuvo más de un año sin poder participar en competiciones internacionales. “Fue difícil emocionalmente porque me encontraba muy bien compitiendo”, recuerda la olímpica española, que cerró su clasificación parisina en las Olympic Qualifier Series de Budapest, en junio, el Preolímpico de los deportes urbanos.

Un muro de 15 metros en 6.86 segundos

El funcionamiento de la escalada de velocidad es simple. El objetivo es escalar un muro de 15 metros en el menor tiempo posible. En el caso de Leslie, eso son 6.86 segundos, el récord de España. “Lo que la velocidad tiene de adictivo es que, a medida que vas avanzando, vas mejorando los tiempos. Esto, quieras o no, es un objetivo que no necesariamente tienes que hacerlo en competición, sino que entrenando también puedes ir viendo los progresos. Eso te motiva un montón y creo que eso es lo adictivo”, dice sobre su disciplina, que no tiene trucos. “La clave es la repetición. Cuantas más hagas, ahí vas rasgando centésimas y milésimas. Debes entrenar todo el día y hacerlo lo mejor posible”, resume. Una Spider-Woman en París.