La primera reina de México

Alexa Grasso fue la primera mujer mexicana en proclamarse campeona en la UFC al derrotar a Valentina Shevchenko en marzo. Se ciñó el cinturón del peso mosca al imponerse por sumisión en el cuarto asalto. Se sumó así a la lista de campeones mexicanos que por aquel entonces formaban Brandon Moreno y Jair Rodríguez (actualmente ninguno ostenta su respectivo título). Es la única monarca que mantiene México dentro de la compañía. La madrugada del sábado al domingo (04:00, Eurosport), hará su primera defensa en una revancha con la peleadora de origen kirguistaní en la UFC Fight Night.

México sumó su tercer campeón el pasado mes de marzo en el UFC 285. Alexa Grasso sometió a Valentina Shevchenko al cogerle la espalda en el cuarto asalto. Dio la gran sorpresa y le arrebató el cinturón a la de origen kirguistaní, que retuvo durante cinco años y defendió siete veces. Shevchenko no era una oponente fácil, pero la mexicana aprobó el examen con nota. Con Grasso, México acumulaba tres campeones en la compañía. En el mismo evento, el UFC 290, los dos monarcas mexicanos perdieron sus títulos. Brandon Moreno cayó ante su bestia negra, el brasileño Alexandre Pantoja por decisión dividida, y Yair Rodríguez no pudo con Alexander Volkanovski, que unificó el peso pluma al quitarle el cinturón interino de la división.

Grasso es la única (y primera) reina que México tiene en la UFC. La tapatía fichó por la compañía en 2016 y ganó a los puntos en su debut a la estadounidense Heather Jo Clark en la UFC Fight Night de su país. Acumula una racha de cinco victorias y la última vez que cayó fue ante Carla Esparza en 2019. Tiene un récord de 16 victorias, cinco de ellas conseguidas en el primer round, y solo ha perdido en tres ocasiones. Este sábado, tendrá que demostrar que su triunfo ante Shevchenko no fue suerte ni una buena noche, y que merece el cinturón que lleva colgado.