BOXEO

La cláusula de rehidratación que iguala a Gervonta y Ryan García

‘Tank’ exigió esta medida para equilibrar las diferencias de altura y tamaño entre ambos boxeadores para el combate del 22 de abril en Las Vegas. Se han apostado la bolsa del encuentro.

CANDICE WARDAFP

Este sábado tendrá lugar uno de los combates del año. A pesar de que no haya ningún título en juego, el combate entre Gervonta Davis (23-0-0, 19 KO) y Ryan García (28-0-0, 26 KO) de la madrugada del sábado 22 de abril en el T-Mobile Arena de Las Vegas, es uno de los más esperados del año. Después de muchos intentos e inconvenientes, se cerró el combate. Tank exigió una cláusula de rehidratación a Ryan García para equilibrar las condiciones de ambos. “Es solo para asegurarme de que todo sea justo”, declaraba Davis en All The Smoke, programa de Showtime. Están tan seguros ambos de su victoria, que en un directo de Instagram se han apostado la bolsa del encuentro.

No hay un título en juego, pero ambos se toman el combate como algo personal. Durante un directo de Instagram, después de varios insultos, se han apostado la bolsa del combate. Nada sorprendente, llevan desde antes de que se anunciara el encuentro con esta rivalidad. Gervonta ha querido igualar el combate con una cláusula de rehidratación. “Es solo para asegurarme de que todo sea justo. Él es un peleador más grande físicamente. Tiene ventaja de estatura, tamaño, longitud de los brazos... De todo. Él tiene más ventaja”, explicaba Tank. El peso pactado es de 136 libras, y solo podrán subir un máximo de 10 libras más el día del choque.

Las cláusulas de rehidratación son comunes en el boxeo. Consiste en una parte del contrato del combate que pacta un peso límite para ambos púgiles a la hora de subir al ring. No pueden rehidratarse todo lo que quieran después del pesaje. Para asegurarse, se realiza un segundo pesaje el mismo día del pleito. El primer pesaje se celebra el día anterior a la pelea, por lo que los boxeadores tienen unas 30 horas aproximadamente antes de subirse al ring para rehidratarse libremente.

Esto hace que muchos de los peleadores aumenten bastante su peso desde el pesaje hasta el momento de la pelea. Con esta cláusula, lo que se pretende es limitar la subida de peso al momento de subir al cuadrilátero. “Estoy tratando de hacerlo un poco más justo. Que sea lo mismo para todos”, aseguró el boxeador de Baltimore. Davis es más pequeño físicamente que García. Mide 1,66 metros, y su oponente 1,80, por lo que ha decidido que era necesario igualar la balanza.

Pero esta cláusula también puede traer inconvenientes para los boxeadores. Si hay una mala rehidratación, el deportista tendrá menos elasticidad en los músculos y será más propenso a lesionarse. Además, su rendimiento será menor, al igual que su resistencia y la fuerza de sus manos. Y no solo puede afectarles físicamente, los daños neuronales serán mayores, ya que el cerebro estará menos protegido y el impacto será mayor. Pueden sufrir derrames, conmociones o coágulos en los peores casos.

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