Karpov, en coma inducido
El ex campeón mundial de ajedrez, según su hija, sufrió un accidente doméstico. Las informaciones sobre el origen se contradicen. “Está estable”, se transmite.
Conmoción en el mundo del ajedrez. El ex campeón mundial Anatoli Karpov, de 71 años, se encuentra en estado de coma inducido en la unidad de cuidados intensivos del pabellón de neurología del hospital Sklifosovski de Moscú. Según su hija, Sofía, después de un accidente doméstico. Así lo ha confirmado en declaraciones al medio ruso Mash, donde ha desmentido los rumores que, en las últimas horas, apuntaban a un posible ataque el pasado sábado. Dicha versión, extendida a través del canal de Telegram ruso 112, aseguraba, sin citar fuentes, que el ajedrecista había sido hallado inconsciente junto a la sede de la Duma, la cámara baja del Parlamento ruso, donde es diputado por Rusia Unida, el partido de Vladimir Putin. Los médicos, según el canal mencionado, le habían diagnosticado una lesión craneoencefálica, una fractura de la cadera derecha y un fuerte estado de embriaguez.
Las informaciones sobre el origen de los hechos, pues, se contradicen. El estado de Karpov, eso sí, según fuentes diversas, sería estable. Así lo ha indicado el presidente de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE), Arkady Dvorkovich. “Según mi información, la condición de Karpov es estable”, ha expresado en el medio ruso Championat. “Acabo de recibir noticias de una fuente fiable de que el ex campeón mundial Anatoli Karpov está bien. ¡Esperamos una recuperación completa!”, ha compartido Susan Polgar. El asistente del excampeón mundial y organizador del Torneo de Candidatos de 2021, Albert Stepanyan, en la agencia de noticias TASS, ha declarado en la misma línea. Como la hija del ajedrecista, también niega la posibilidad de una presunta agresión, sobre la que habían informado publicaciones nacionales como Baza o Moskovsky Komsomolets. También el jefe del Movimiento de Empresarios de Rusia, Andrey Kovalev, que apunta a presuntos agresores, a los que espera que identifiquen. “Está en estado crítico en el hospital. Dios lo bendiga. Oramos por la salud. Qué buena persona. Espero que se encuentre al villano”, dice en declaraciones recogidas por Star Hit. “La información de que Anatoli Karpov fue golpeado no se corresponde a la realidad. Es una noticia falsa”, ha publicado, por otro lado, la agencia RIA Nóvosti.
Karpov ostentó el título de campeón mundial de 1975 a 1985. Durante su extensa trayectoria, salió vencedor en más de 160 torneos, ya sea en solitario o compartiendo la primera posición, y se mantuvo entre los 100 mejores del ranking durante 38 años. Fue considerado nueve veces mejor jugador del año, ganando el Óscar del Ajedrez, y disputó diez finales por el título mundial. No se puede entender la historia del ajedrez sin él. Tampoco sin su rivalidad con Garry Kasparov, quien le destronó en un contexto que iba mucho más allá del deporte. El mundo les observaba en medio de un clima de tensión política, con el que ambos convivieron desde el inicio de sus carreras. Karpov, sin ir más lejos, se sentó en el trono por primera vez debido a la renuncia del estadounidense Bobby Fischer, que se negó a defender el título ante él. Tres años después, y mientras un joven Kasparov empezaba a brillar, lo defendía ante Viktor Korchnoi, uno de los mejores jugadores de siempre sin corona mundial.
En total, Karpov, nacido en una familia tipo de la Unión Soviética, y Kasparov, nacido en Bakú y representante del cambio, se enfrentaron en cinco campeonatos del mundo, con 21 victorias para el segundo, 19 para el primero y 104 tablas. Dentro de su leyenda, destaca el duelo iniciado en 1984 y finalizado en 1985, en el que Anatoli, de 33 años, puso en juego su título mundial ante Garry, de 21, en un enfrentamiento suspendido por el presidente de la Federación Internacional de Ajedrez, Florencio Campomanes, debido a cansancio físico y psicológico, después de 40 tablas. En la reanudación, Kasparov alcanzaba el cetro. Tras un cisma que generó campeonatos mundiales paralelos, Karpov sumó seis años más como campeón, del 1993 al 1999. En la actualidad, su rivalidad fuera de los tableros ha seguido, siendo Kasparov, exiliado en Nueva York, una de los grandes caras de la oposición a Putin.