Juli Giner: “He vuelto a resurgir”

Juli Giner (23-4-1, 8 KO, 42 años) fue uno de esos púgiles que marcó una época dorada en el boxeo español. El catalán estuvo en la Selección Española, y como profesional, fue campeón de España, de Europa y número dos en el mundo. Se despidió del boxeo (como competidor) hace más de cinco años, pero decidió volver al ring para regalarle a los aficionados un brillante combate con Kiko Martínez (44-12-1, 31 KO) y despedirse a lo grande, el 15 de febrero de 2025 en Badalona, en una cartelera que compartirá con Sergio Maravilla Martínez y César Córdoba, además de otros nombres que se irán revelando conforme se acerque la fecha.

Vuelve Juli Giner. Un regreso que muchos llevaban pidiendo desde hacía tiempo, aunque fuese un combate más. Una despedida a lo grande, que es lo que se merecía una carrera como la que tuvo el boxeador catalán. “Me han ofrecido otra pelea en otro país, que quizás sí será mi despedida. Seguramente será mi despedida en Barcelona, en mi casa. Más adelante puede haber una despedida en otro país, en América”, revela a As The Rock. El evento, que se llama ‘Noche de Leyendas’ y está organizado por la promotora Fight Lover Promotions, constará de una cartelera muy completa, con combates de MMA y boxeo, además del plato fuerte de la noche. “Van a enfrentar a boxeadores que han marcado una época a asaltos de dos minutos y seis rounds”, cuenta Juli. Y, por si fuesen poco los pleitos anunciados, todavía quedan por revelar.

Giner fue regidor de deportes de Premià de Dalt, su pueblo, en el que tiene un gimnasio donde da clases y saca a chavales a pelear. Además, es el impulsor del Trofeo Juli Giner, que ya va por su tercera edición, que toda su recaudación va destinada a becas deportivas para jóvenes en riesgo de exclusión social. Es su ángel de la guarda. “Me encuentro ahora en un estado emocional muy bueno. Me separé en diciembre y la verdad es que he vuelto a resurgir”, explica. Juli colgó los guantes antes de la llegada de la pandemia. En febrero de 2019, disputó el EBU del peso superpluma (un cinturón que ya se ciñó años atrás y quería recuperar). “Me retiré en medio de una pelea con Samir Ziani en Campeonato Europa en casa. Me retiré porque, en medio de la pelea, me pasaron muchas cosas por la cabeza y decidí que ahí. Se acababa el boxeo para mí, por mi estado de ánimo o mi estado de salud”, rememora.

Su esquina lanzó la toalla en el sexto asalto en el Palau Olímpic de la Vall d’Hebrón de Barcelona. “Yo no estaba bien. No disfrutaba de nada, ni del proceso ni de la pelea. Subí muy mal, los golpes me dolían y decidí que se acabó el boxeo ahí. Entonces, me retiré de una forma muy mal”, recuerda Giner. Con la fuerza y el coraje de los boxeadores, Juli salió de ese pozo y se encuentra en su mejor momento. Feliz y con ganas de volver a hacer disfrutar a los aficionados, además de disfrutar él mismo con las preparaciones y todo lo que comporta el deporte que ama. “También le quiero dar un impulso a mi negocio, que los nuevos me conozcan. Mucha gente no me conoce, quién fui. Es una oportunidad para mí de darme a conocer un poco. Y disfrutar el proceso, de tener una preparación disfrutándola. Yo nunca disfrutaba ninguna preparación, porque trabajaba, tenía una familia, siempre estaba a nivel económico jodido... Siempre era muy estresante todo”.

Una oportunidad de oro

Juli ya está en marcha para el combate y tiene un entrenador de lujo. Sergio Blanco, otra de las joyas de la época y amigo suyo muy cercano, será el encargado de la preparación del catalán. Ambos compartieron muchos momentos juntos cuando eran competidores en Gallego Prada. “Sergio me conoce hace 15 años, cuando yo era amateur y era profesional y nos ayudábamos. Es el único entrenador en Barcelona con el que puedo tener la confianza para que esté conmigo, porque me conoce mucho. Sabe mis puntos débiles, mis puntos fuertes”, revela el catalán.

Y no es para menos. El reto es Kiko Martínez. Fue campeón mundial y europeo en dos divisiones, un icono del boxeo en nuestro país y en todo el mundo. “Yo necesito a alguien con mucha confianza en la esquina para un combate de esta importancia. Voy a tener delante Kiko Martínez, que es nuestro ídolo desde pequeño del boxeo español y es un referente. Con todo el respeto que le tengo, no se merece que no estuvo preparado a esa pelea”. Para ello, Juli quiere viajar a Estados Unidos, a Miami, para prepararse a lo grande junto a Ismael Salas y campeones mundiales. Además, Giner reveló que Kiko aceptó el choque porque él es el oponente. “Él no quería pelear. Le dijeron mi nombre y entonces quiso. Para mí, eso es un halago muy grande y me da muchas ganas de prepararme bien para dar un buen espectáculo”, cuenta el catalán. Un combate entre dos leyendas amadas por el público.

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