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Jones se ríe de Aspinall con un caballo con un parche en el ojo

El excampeón de los pesos pesados se ríe de la lesión ocular que le impidió al británico continuar con su primera defensa. Apareció con un caballo con un parche en el ojo.

Rula Rouhana
Nació en Martorell en 1999. Grado en Periodismo en la Universidad Autónoma de Barcelona. Desde pequeña, tenía claro que quería ser periodista y hablar del Atlético de Madrid, hasta que descubrió el boxeo y las MMA. Entró en AS en 2022 y fue la enviada especial a Anaheim, California, para cubrir la disputa por el título del peso pluma de Topuria.
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La primera defensa del cinturón de los pesos pesados de Tom Aspinall no salió como esperaba. Un piquete en los dos ojos a manos de Ciryl Gane no le permitió pasar del primer asalto. El británico recibió duras críticas, tanto por parte de aficionados como de peleadores, pero el que más se cebó fue Jon Jones, exmonarca, que insistió con burla tras burla.

Aspinall era el campeón interino, y se pasó años pidiendo la oportunidad. En un evento apareció con un pato de plástico como un ataque a Jones, monarca en aquel momento. En inglés, la palabra “ducking” significa “evitar pelear con alguien intencionadamente”, y es una expresión que se utiliza para decir que un peleador esquiva a otro.

Bones le devolvió la “broma”. Después del No Contest en el UFC 321, Tom fue directamente al hospital de Abu Dabi para realizarse algunas pruebas. Todo salió bien, le dijeron que no tenía ninguna lesión grave o permanente, aunque salió con un parche en el ojo. Tras ello, el estadounidense cambió la fotografía de sus redes sociales a un pato con el cinturón de la UFC con un parche negro en el ojo, riéndose claramente del británico.

La cosa no terminó ahí. Ayer fue el pesaje ceremonial de Dirty Boxing Championship (DBX) 4, empresa de la que es copropietario Jones junto a su socio Mike Perry. El excampeón de la UFC llegó montado en un caballo blanco, que llevaba tapado el ojo derecho con un parche, acompañado de varias chicas del ring. “Hay que hacerlo bien. Tenemos el hermoso caballo con el parche en el ojo, vamos a tener una buena noche”, dijo Bones al llegar al recinto.

Y seguramente Jones no dejará la broma aquí. No quiso unificar la división de los pesos pesados con Aspinall al no considerarlo un rival lo suficientemente serio o importante para su legado. Muchos le acusaron de tenerle miedo, sangre joven con hambre de victorias, aunque él siempre lo negó. Dejó el cinturón vacante y anunció su retirada, pero ahora apunta a un combate con Alex Pereira, doble campeón de la compañía, en el UFC Casa Blanca del próximo verano.

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