Iris Tió reescribe la historia de la ‘sincro’
Tres oros, seis medallas, en seis días se colgó la nadadora artística en los Mundiales de Singapur. Su timidez se transforma en ciclón dentro del agua: “No me pongo límites”.
Costaría encontrar, si es que existe en la actualidad, una (o un) deportista capaz de conquistar más medallas mundiales en menos tiempo que ella, sea española o no. Seis veces subió al podio del 19 al 25 de julio una Iris Tió (Barcelona, 02-11-2002) que va a por faena, con una responsabilidad tan elevada como su arte. La demostración más palpable es que, con tal de perder el mínimo de entrenamientos posible, acudió a Madrid a recoger el Premio AS del Deporte en el Ave más tardío posible, y regresará a Barcelona este martes a primerísima hora. El perfeccionismo puro de una hija de músicos clásicos que deleita al planeta al ritmo de Céline Dion, Led Zepellin, Rosalía o los Backstreet Boys, y una elegancia única.
Recatada, humilde, casi sonrojada cuando el presidente del Consejo Superior de Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes, le entregaba el galardón, la artista que se transforma sobre el escenario, en su caso en el agua, hizo historia Iris en los Mundiales de Singapur al convertirse en la primera española que se proclama campeona en un solo libre, algo que ni siquiera lograron Gemma Mengual, Ona Carbonell ni Andrea Fuentes, su actual entrenadora y artífice de acabar de dar rienda suelta a ese derroche de talento. Del miedo a la magia.
También se colgó el oro la barcelonesa en el dúo libre femenino, con Lilou Lluis, y en el mixto, junto a un Dennis González que le acompaña en eso de marcar hitos en la natación artística. Y completó la hazaña con tres bronces: en el solo técnico, el equipo libre y el equipo técnico. Y porque ella no participó en más rutinas, pues nueve medallas logró España, su récord de siempre.
“Todavía soy joven y veo que me queda mucho por mejorar. Estoy motivada para seguir entrenando y compitiendo al máximo nivel, así que no me pongo límites”, afirmó, tras recibir el premio.
La mejor nadadora artística en Singapur 2025, sin discusión alguna, y mejor deportista acuática europea no es flor de un día. En el Hotel Palace de Madrid se premiaba a una estrella que brillaba ya a los 16 años, con un bronce en Gwangju 2019, que ha subido 25 veces ya al podio entre Mundiales, Europeos y Juegos Olímpicos, con el glorioso bronce por equipos en París 2024. “Toda mi vida gira en torno a la natación artística, toda la energía va para el deporte”, indicó este lunes.
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Allí, al Centro Acuático de Saint Denis, regresará el próximo agosto, en un Europeo que supondrá un paso más hacia el doble reto de Iris Tió y de toda la Selección española: alcanzar la cumbre en Los Ángeles 2028, reescribir la historia de la natación artística universal.
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