Gisela Pulido: “Ganar diez mundiales no te asegura una medalla olímpica”

Dos días después de ganar la medalla de bronce en el Europeo de Formula Kite, Gisela Pulido (Barcelona, 1994) atendió a AS. Ya se encuentra en Cerdeña, donde el 11 de este mes arranca el Mundial. La regatista española está en pleno ciclo olímpico y es que su nuevo deseo es disputar los Juegos de París 2024. La diez veces campeona del mundo de Kitesurf freestyle (el primer título lo logró con solo 10 años y figura en el libro Guinness de los récords como la campeona mundial más joven de la historia de su deporte), decidió parar durante dos años para recuperar la pasión por la competición y vuelve a volar por los mares confirmándose como lo que es: una de las reinas del kite.

-Hace solo dos días ganó la medalla de bronce en el Europeo de Formula Kite. ¿Ya la ha asimilado?

-La verdad es que quizás sorprendió un poco porque hasta entonces no había tenido ningún resultado de podio en esta modalidad. Estoy muy feliz. Salió todo bastante bien y lo importante es que este Europeo fue la primera competición en la que me vi con opciones técnicas y tácticas de estar entre las mejores. Antes veía que me faltaba un puntito para llegar y esto me ayuda a aumentar mi confianza.

-Fue diez veces campeona del Mundo de kitesurf freestyle. ¿Por qué ha optó por el Formula Kite?

-Siempre soñé con ir a unos Juegos Olímpicos y en Formula Kite lo puedo cumplir. Todo deportista quiere defender a su país y quiero estar en París 2024. Además, tras diez años ganando el Mundial de freestyle me faltaba un poco de motivación y tras tanto tiempo quería cambiar. La parte mental es importante en el deporte.

-Por eso paró dos años...

-Sí, al final no puedes estar compitiendo si tu cabeza no está lista para ello. Da igual que estés bien físicamente porque si la mente no tira o no estás... El tema está en que quería vivir mi vida. Estaba siempre compitiendo, sin tener tiempo para mí. Mis primeras vacaciones fueron en los dos años de parón. Frené, viví, estuve con mi perro y, aunque estaría siempre con él, ahora estoy otra vez en competición. Paso firme y a volver a disfrutar.

-¿Ya está al cien por cien? ¿Con Formula Kite ha recuperado la ilusión por competir?

-Sí, si decidí parar dos años fue porque yo quise. Y lo de entrar en Formula Kite igual, lo decidí yo. Probé la disciplina y me gustó. Aunque tuve un par de veces de plantearme de sí me metía de lleno o no porque venía de dos años de vivir por y para mí. Es muy importante que te guste lo que haces y ahora mismo estoy feliz y con ganas. Quiero estar en París 2024. Durante el parón hice surf, disfruté mucho del tiempo libre y en definitiva viví mi vida, que ya lo necesitaba. Pero estar en unos Juegos me llama mucho y es mi objetivo, lo que más deseo ahora mismo. Estoy comprometida con la campaña olímpica y aunque sé que apenas te deja tiempo, querría pasar más tiempo con mi perro, lo estoy disfrutando. Me encanta el kite y voy a ir a por todas.

-Los deportistas tienen un gen competitivo muy arraigado. ¿Durante los dos años de parón no lo echó de menos?

-A veces. Había días que era complicado gestionarlo porque no sabía qué hacer. No tenía esa adrenalina ni la presión de competir por un podio y sí, pensé en ello. Pero nunca he estado alejada del mar, en Hawai, Fidji es imposible estar mal. Pero bueno ahora estoy de vuelta, compito y me siento igual de realizada.

-¿Se ve en el podio en París 2024?

-Ojalá, me encantaría. No estoy en Formula Kite para estar en el Top-10, sino para lograr una medalla. Aunque paso a paso porque hay chicas muy buenas y todo se decide por detalles. Así que mi primer objetivo es clasificar al país y no será fácil porque van solo 20. Las primeras plazas nos las jugaremos en el Mundial del año que viene en Holanda. Ahí esperamos lograrlo porque si no después hay opciones, pero la presión ya será muy alta. Imagínate jugarte una plaza para los Juegos dos meses antes de disputarlos... el estrés puede ser brutal. Por eso mejor clasificarnos ya el año que viene en Holanda y preparar los Juegos con tranquilidad.

-El freestyle y Formula Kite parecen deportes diferentes...

-Sin duda lo son. Hay un montón de diferencias, desde el material, que no tiene nada que ver, hasta el formato de competición. Aquí vamos con una cometa que no tiene estructura rígida, es como un parapente que se llena de aire. Y la tabla no va por el agua, sino que va por encima con un foil. Aquí no tienes trucos y saltos, es velocidad y el que llega primero gana. Es otro mundo.

-En Formula Kite, cuanto más pesas más rápido vas...

-Cierto y esa es una de las desventajas que me estoy encontrando ahora mismo, que compito con gente que me saca 20 kilos. Aunque yo tampoco quiero ganar peso en solo tres meses. Quiero hacer las cosas bien, prepararme bien e ir paso a paso. Estoy haciendo trabajo de gimnasio, bicicleta y comiendo muchos aguacates (sonríe).

-Usted es vegana...

-Sí, por eso estoy hinchándome a aguacates y a comer ensaladas con un montón de aceite de oliva (sonríe). He de comer más de lo habitual, pero es cuestión de calorías, tampoco me obsesiono. La clave está en la dieta, la constancia y el gimnasio. Además, el peso es importante porque te hace correr más, pero hay otras cosas que hay que tener muy en cuenta como la parte táctica y de estrategia. Yo creo que no gana el más rápido, sino el más inteligente porque hay que elegir el lado bueno, trasluchar rápido y ser eficiente. Si vas más rápido, pero vas por el lado malo no sirve de nada.

-¿Aún le siguen recordando los diez títulos mundiales?

-Lo que más el primero, ya que fue con diez años. La gente me lo sigue diciendo y más cuando me presentan. Creo que es un extra de presión porque la gente puede esperar más de ti al haber sido diez veces campeona del mundo en freestyle. Pero hay que entender que Formula Kite es otra disciplina, muy distinta. Ganar diez Mundiales de freestyle no te asegura una medalla olímpica en Formula Kite. Me encantaría, claro, pero en el deporte no hay nada seguro. Hay que trabajar y ganárselo.

-En una semana arranca el Mundial. ¿Qué perspectivas tiene?

-Mi objetivo en el Europeo era entrar en el equipo olímpico y para ello debía estar en el Top 5. Lo cumplí así que ahora al Mundial voy más relajada. Lo importante era estar dentro del equipo olímpico y asegurarte las ayudas porque este es un deporte bastante caro. Las ayudas son importantes. De cara al Mundial quiero corregir todos los errores del Europeo e intentar mejorar. Lo que busco es la estabilidad y consistencia en todas las regatas.