España mantiene el sexto puesto

Quince años después el equipo español masculino ha vuelto a una final de un Mundial, la segunda en su historia tras aquel grupo mítico de 2007 en Stuttgart, con Gervasio Deferr, Rafa Martínez, Manu Carballo, Isaac Botella, Iván San Miguel y Sergio Muñoz, que acabó sexto. Ahora en Liverpool con un sistema diferente, tres por aparatos y todas las notas válidas: Joel Plata (en los seis aparatos), Mir (cuatro), Néstor Abad (tres), Ray Zapata (tres) y Diallo (dos) se han repartido el trabajo los españoles en la final, una competición muy abierta y que ha tenido un desenlace sorprendente en atención a cómo se clasificaron los equipos.

China, por regularidad y calidad, consigue el primer puesto (257,858) rebasando con claridad a Japón (253,395) que se despidió de sus opciones al principio en el caballo que más que de arcos ha sido de tortura, también para Brasil, para Estados Unidos, y para Gran Bretaña, que al menos ha remontado con los ejercicios de fuerza para acabar tercera (247,229). Tres países que ya tienen el billete olímpico en sus bolsillos.

Por momentos Italia estuvo cerca de esa tercera plaza, peleando a brazo partido con España, que se rezagó unas décimas en la tercera rotación (paralelas) y ya no pudo remontar. Para italianos y españoles el final era el famoso potro, con Estados Unidos subiendo con aparatos más sencillos, y con Brasil y Corea definitivamente perdidos.

Italia (245, 988) y España (244,027) cumplieron, pero Estados Unidos se colocó entre medias, tres décimas por delante de los españoles. Repasando las notas, las de estos Mundiales, por ejemplo, hay margen de mejora para encarar con éxito el de 2023.

LAS NOTAS DE LA FINAL