El vuelo de Dani Teixidor
El madrileño se ha colgado la plata continental Sub-21 de esquí náutico. Es uno de las grandes promesas mundiales de este deporte.
Dani Teixidor lleva desde que era niño sobre dos esquís en el agua. Lo aprendió en casa, junto a su hermano Tono y su padre Dani, en el pantano de San Juan. Desde los dos años hasta ahora, que se ha convertido en una de las grandes promesas mundiales del esquí náutico, ese deporte en el que un barco lanza a toda velocidad al deportista. “Es bonito seguir con la tradición familiar y estar ahí”. Y tanto que está con los mejores…
A sus 20 años, se ha colgado la plata europea Sub-21 en Burdeos (Francia), en la modalidad de eslalon, la más popular de este deporte. “Fue impactante, porque no esperaba tanto, pero salió perfecto, estuve muy cerca de la medalla de oro”, comenta el madrileño, que solo cedió ante el italiano Florian Parth.
Al contrario que muchos rivales que están ‘profesionalizados’ en Estados Unidos, Dani Teixidor sigue entrenándose en casa, con las enseñanzas de su padre y lo que ha sumado de algunas estancias en Norteamérica. “Es un deporte que no es muy conocido para el gran público. Sin embargo, en el alto nivel la gente está preparadísima, se van a Estados Unidos para mejorar al máximo”, narra Dani, que vivió tiene su fortín en Madrid, en San Juan.
Estudiante de Administración de Empresas y Análisis de Datos, Teixidor es consciente que no puede practicar todo lo que debería. “Es un deporte que solo se puede hacer con buen tiempo, y en Madrid no siempre es posible”, explica Dani, que ha encontrado una alternativa bastante buena: “En invierno hago boxeo y mucha preparación física en el gimnasio. Hay que currárselo para luego llegar fuerte al verano. Se nota mucho cuando estás bien, a la hora del equilibrio sobre las tablas. Ganas estabilidad y controlas más”.
Su padre Dani reafirma la visión: “Está hecho un toro. Este es un deporte en el que ejercitas todos los músculos: pierna, dorsal, brazos, trapecio, la verdad es que es muy completo. Dani se enfrenta a gente que está 10 meses entrenándose en agua en Estados Unidos. Nosotros tenemos solo 4 o 5 meses de buen tiempo y así es complicado, pero ahí está el chaval dando la cara”.
Dani es muy joven y sueña en grande. “Me encantaría ganar medalla en un Mundial”, explica este deportista, que tiene el apoyo de la Comunidad de Madrid. No duda en vender su deporte: “La verdad es que es muy chulo. Esa sensación de velocidad, estar en un medio como el agua, con el barco…” Es una de las joyas de Europa. Dani Teixidor vuela.
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