PICKLEBALL

De LeBron a Özil: el deporte que lo está revolucionando todo

El pickleball, un fenómeno de masas con 36,5 millones de jugadores en EE UU, coge impulso en España. Grandes estrellas invierten en él.

Ernesto Cárdenas es profesor de instituto. En 2013, a través del programa Profesores Visitantes en Estados Unidos, emprendió la aventura americana. A los ocho años, empezó a jugar al tenis. Luego, se aficionó al pádel, al que le ha dedicado buena parte de su vida deportiva. Sin esperarlo, se enganchó al pickleball. Tanto que, al volver a España, comenzó a ganar torneos sin parar. A día de hoy, es uno de los mayores referentes nacionales del mencionado deporte de raqueta, un nuevo fenómeno de masas. “Es lo que conocían allí…”, recuerda. Una pelota de plástico agujereada, una red y una pala plana. No se necesita más para un amor a primera vista. “Al aterrizar (en EE UU), para conocer gente, empecé a buscar clubes de pádel, pero me di cuenta de que allí no estaba muy de moda. Y conocí el pickleball. Me aficioné mucho, mucho”, explica.

Como él, 36,5 millones de estadounidenses, según un informe de USA Pickleball publicado este mismo año. En las cifras, se indica que el 14% de los norteamericanos practicaron pickleball en los últimos 12 meses y que el número de pistas disponibles llegó a 44.094, un 15,6% más. Entre los motores de este crecimiento, LeBron James o Tom Brady, siempre audaces en sus inversiones. También Kevin Durant, Dirk Nowitzki, Patrick Mahomes, Mesut Özil o Michael Phelps. Todos invierten en un deporte que, en EE UU, cuenta con tres circuitos, el de la Major League Pickleball (MLP), el de la Professional Pickleball Association (PPA) y el de la Association of Pickleball Players (APP). En suma, ofrecen una bolsa de premios de entre 9 y 11 millones de dólares. De media, un jugador profesional gana 50.000 dólares al año.

El jugador de la NBA Trae Young, en un partido de Pickleball.KEVIN C. COXAFP

Saque por abajo, una pelota más controlable, una pista de 13,41 x 6,1 metros, fácil de cubrir, una pala liviana y reglas sencillas. La curva de aprendizaje del pickleball es más agradecida que la de otros deportes de raqueta (como el tenis, el pádel o el bádminton, disciplinas que combina), lo que deviene en un imán para todos aquellos que lo prueban. “Es bastante fácil de jugar. Como en todos los deportes, para jugar bien hay que entrenar, pero, de primeras, todo el mundo puede divertirse”, desmenuza Ernesto. Más allá de las facilidades para dar el primer paso, según Cárdenas, detrás también hay un importante componente social: “El hecho de ser una pista bastante reducida hace que haya mucho contacto con compañeros y rivales. Que los partidos sean cortos (con sets a once puntos) también refuerza ese lado social. Hay muchas rotaciones. En un partido de tenis o de pádel juegas una hora y media, contra las mismas parejas, y te vas a casa; en este deporte, en ese tiempo, juegas con 20 personas distintas”, sigue analizando.

Un gran paso en España

Cuando volvió a España, casi sin saberlo, Ernesto recogió el testigo de tres padres desesperados, de vacaciones en Bainbridge Island (Washington), que no sabían muy bien cómo entretener a sus hijos. De ese 1965 en esa isla del condado de Kitsap, donde nació el pickleball, a 2017, cuando Ernesto puso fin a su experiencia yanqui, volviendo como un ídolo de la disciplina. En 2012, sin embargo, el deporte ya empezaba a echar raíces en suelo español. Michael Hess, estadounidense de viajes habituales a la península, fundaba la Asociación Española de Pickleball. Ahora, la dirigen Roberto Pérez, presidente, y Marc Declerq, vicepresidente y secretario general de la federación europea, con más de 30 países representados.

“Lo que en Estados Unidos ha costado 70 años, nosotros lo vamos a hacer en diez o quince, aprendiendo de ellos”, dice un orgulloso Declerq. En el último Open de España, uno de los certámenes más importantes en Europa, se registraron casi 300 participantes. En 2017, se organizó la Bainbridge Cup en la Ciudad de la Raqueta (Madrid), la Copa Davis del pickleball. “En Estados Unidos, se han creado circuitos profesionales, tienen ranking oficial, televisión… Paso a paso”, valora. Y con alguna zancada. El pasado 12 de septiembre, la Real Federación Española de Tenis (RFET) anunció que el pickleball se integraba dentro de su estructura. A raíz de ello, según pudo saber AS, este año, se organizará el primer Campeonato de España de Pickleball oficial. Como síntoma del crecimiento, las dos academias de tenis referentes a nivel nacional acogerán próximamente el Mediterranean Open, su primer torneo de pickleball. La Rafa Nadal Academy by Movistar lo hará los días 8, 9 y 10 de diciembre y la Ferrero Tennis Academy, del 1 al 3 de marzo de 2024.

El pickleball, en datos
- Lo practican 36,5 millones de estadounidenses
- Hay más de 44.000 pistas en EE UU
- 11 millones de dólares en premios en EE UU
- Sueldo medio de un profesional: 50.000 dólares
- 20.000 practicantes en España
- Casi 300 participantes en el último Open de España
- Estimación del mercado de las palas en 2028: 253,8 millones

“Desde que anunciamos la integración, es una locura”, celebra Declerq, cuya asociación, tomando forma de comité, ha pasado a conocerse como Real Federación Española de Tenis Pickleball. “Tras verlo en redes, nos dimos cuenta de que tenía muchas posibilidades de crecer. Además, es muy horizontal. Hablamos con la asociación existente y con el CSD y llegamos a un acuerdo”, desgranan desde la RFET a este periódico. “A Miguel Díaz (presidente de la RFET) le quedó muy claro que si alguien tenía que ayudar éramos nosotros. Desde entonces, iniciamos el camino teniendo en cuenta las especificidades del deporte. Todo el personal de la federación lo entendió muy bien”, añaden desde la asociación. En España, el número de practicantes ya está en 20.000.

Pasear por San Francisco, el espejo

En Florida, según The New York Times, un grupo de inversores está destinando más de 280 millones de dólares en construir 15 clubes privados de pickleball. USA pickleball espera que, en 2028, el tamaño del mercado de las palas de pickleball sea de 253,8 millones. Hay inversión privada y acceso para toda la ciudadanía. “Vas a San Francisco, sales con tu pala y encuentras una pista pública de pickleball con mucha facilidad. Entras, juegas un rey de la pista… Eso es imposible en tenis, pádel o bádminton. Eso hace que el crecimiento sea muy rápido”, explica Declerq, añadiendo razones a la expansión y, al mismo tiempo, mirando con cierta envidia la situación estadounidense.

A nivel internacional, a través de una acción conjunta de las cinco federaciones continentales, ya se están dando pasos para iniciar el camino olímpico, que requiere de la expansión planetaria. En España, ya hay pistas disponibles en todas las comunidades autónomas. Ernesto, con una inversión “muy pequeña”, ha implantado el deporte en su instituto: “Ha sido muy bien acogido. Es un deporte que ya está en el currículum de contenidos, además. Es perfecto para iniciarse en el mundo de la raqueta, abre un montón de posibilidades”, desgrana. El pickleball busca su sitio, metafórica y literalmente hablando. Como fin en sí mismo o como transición hacia otros deportes de raqueta, como el tenis, con el que ha empezado a compartir espacio. Para algunos, un problema. “Si el pickleball es tan popular, que se construyan sus propias pistas”, declaró Martina Navratilova en plena explosión del fenómeno.

En Asheville (Carolina del Norte), el año pasado, se presentó un proyecto para convertir tres pistas de tenis en ocho de pickleball. Y los aficionados al tenis estallaron. En Exeter, un pueblo de menos de 15.000 habitantes en Nuevo Hampshire, se propuso transformar tres de las ocho pistas de tenis que existen. Así, un caso tras otro. En Estados Unidos, la guerra es real. “Se ha creado hasta un lobby para evitar que siga ocurriendo”, explica Marc. En España, de momento, se respira tranquilidad: “Todo el mundo lo está recibiendo bien y se va a apostar fuerte por ello”, trasladan desde la RFET. Muchos tenistas y extenistas también han acogido el pickleball con los brazos abiertos. McEnroe, Sharapova, Agassi, las Williams o Isner ya lo practican. Bouchard, incluso, anunció que en 2024 competirá en el PPA Tour. “Estoy feliz de ver a gente con cualquier tipo de raqueta en la mano”, dijo Venus Williams para dar la bienvenida al pickleball, que ha llegado para quedarse.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todas las claves deportivas del día.

Lo más visto

Más noticias