PREMIOS PRINCESA DE ASTURIAS DE LOS DEPORTES
Carolina, una llamada inesperada... ¿y otra por llegar?: “Ser abanderada sería un sueño”
La española habla con AS tras ser anunciada como Premio Princesa de Asturias de los Deportes. Ahora, piensa en los Juegos con nuevas ilusiones.
De forma totalmente inesperada, este miércoles, la vida de Carolina Marín cambió “en un segundo”. Mientras entrenaba, sobre las 11:00 de la mañana, el teléfono de la campeona olímpica empezó a echar humo. “En uno de los descansos de los ejercicios, me ha dado por mirar el móvil y tenía cinco o seis mensajes de mi madre y un par de llamadas perdidas”, reconstruye Carolina en conversación con AS. Aún no lo sabía, pero su agenda del día estaba a punto de cambiar por completo. No iba a recibir una noticia cualquiera. La onubense, con tres oros mundiales y ocho europeos en su palmarés, había sido galardonada con el Premio Princesa de Asturias de los Deportes 2024.
“Carito, es superurgente. Carito, por favor, coge la llamada que te están haciendo. Carito, sé que estás entrenando, pero es muy urgente”, se podía leer en los whatsapp de su madre, Toñi Martín. “Entonces, le he intentado llamar, porque me he puesto en la peor situación, que le había pasado algo a un familiar mío, pero me ha colgado. De repente, me han transmitido la noticia, a través de un hombre que se llamaba Carlos, y me he puesto a llorar. No me lo creía. Ni sabía que estaba nominada, ni sabía que hoy se iba a anunciar al ganador. Ha sido todo muy de sorpresa”, continúa en su relato. Desde ese momento, su día, con la presentación de documental ‘Power: La fuerza de un sueño’ prevista para las 11:30, cambió por completo.
“Era un premio con el que soñaba desde hace varios años y hoy me lo han dado. Luego, ya he podido hablar con mi madre, pero han sido cinco segundos con las dos llorando. ‘Cuando nos salgan las palabras, nos volvemos a llamar’, le he dicho (risas). Estaba con mi preparador físico (Guillermo Sánchez), le he abrazado y me he secado las lágrimas”, completa Carolina, sin respiro tras salir de un entrenamiento que completó, fiel a su carácter. “No sé ni quién me ha felicitado. He ido corriendo a casa para ducharme. He tenido que poner el móvil en silencio, porque la gente no me dejaba ni ducharme con tantos mensajes y llamadas, y hemos podido organizar la rueda de prensa. En este momento, no sé si mi móvil habrá explotado ya”, explica feliz.
En las próximas semanas, Carolina podría recibir otra llamada inesperada. A día de hoy, es la deportista mejor posicionada para ser la abanderada de España en los Juegos Olímpicos de París, al lado de Marcus Cooper. La otra opción más lógica, Maialen Chourraut, que compite el día siguiente al de la ceremonia inaugural, ya expuso sus complicaciones para poder portar la bandera. “Dada la situación, cualquier llamada es bienvenida. Que toda llamada sea para algo como lo que ha sucedido hoy, que la vida me cambie de esta forma de un segundo para otro. El tema de ser abanderada, todos los deportistas soñamos con, primero, conseguir una medalla olímpica y, luego, portar la bandera de tu país. Para mí, obviamente, sería un gran sueño, claro que sí”, dice al respecto una Carolina con aún sueños por cumplir.
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.