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WATERPOLO (M) | DOHA 2024

Al cuarto podio seguido se va por Francia

La Selección masculina traza el camino de la femenina, en la agridulce lucha por el bronce, que sería su cuarta medalla mundial consecutiva, ante un rival que se ha ido agigantando.

MOHAMED MESSARAEFE

No es un lobo con piel de cordero, porque el lomo de oveja se lo descubrieron hace ya demasiados meses. Exigirá Francia, otrora un adversario asequible, lo indecible a una Selección española masculina que buscará este sábado (9:30, hora peninsular española), qué remedio, su segundo bronce consecutivo en unos Mundiales. O lo que es lo mismo, su cuarta medalla mundial seguida, tras la plata de Gwangju 2019, el oro en Budapest 2022 y el susodicho tercer puesto en Fukuoka 2023.

Nadie puede decirle a España que no está avisada de los peligros que entraña el combinado francés, venido increíblemente a más conforme se acercan los Juegos que este verano albergarán en París, y donde los de David Martín –desechada ya la posibilidad de la Triple Corona, a pesar del reciente oro en el Europeo de Croacia– irán a por todo. Enormemente le ha complicado la vida el equipo de Florian Bruzzo desde Fukuoka a los españoles, que les apearon en cuartos de final de la lucha por las medallas con un 7-6 que en realidad era un 4-6 a falta de sólo cuatro minutos, y en enero en el Europeo (9-6), donde a falta de 70 segundos marchaban con un corto 7-6 que se podía decantar hacia cualquier lado.

El otro enemigo de la Selección, como ya se comprobó este viernes en los primeros compases del España-Grecia femenino (10-9), será su propio poderío mental. A diferencia de Francia, que venía de ser sexta en los pasados Mundiales y que no está acostumbrada a grandes éxitos, para los españoles caer en semifinales ante Italia (6-8) después de haber enlazado nueve triunfos supone un mazazo del que cuesta sobreponerse. Si bien también es cierto que hace siete meses lo hicieron de maravilla, al derrotar a Serbia (9-6) en la final de consolación, con una formidable actuación de Edu Lorrio.

Felipe Perrone, ante Gonzalo Echenique, en la semifinal del jueves.CLODAGH KILCOYNEREUTERS

Un bronce aquél que apenas celebraron, porque su aspiración es máxima. Y cuyo punto de mira ya está puesto en los Juegos Olímpicos de julio. Qué mejor manera de empezar a ganarlos que colgándose hoy una nueva medalla, con la que en la época de David Martín igualarían (no en color, eso sí) las cuatro que conquistó en Mundiales la primera generación de oro del waterpolo español.

David Martín: "Tenemos que levantarnos"

“Tenemos que levantarnos, porque el último partido de un gran campeonato es el más importante, en este caso nos toca luchar por el bronce, hay que darle mucho valor a las medallas”, constataba este viernes el seleccionador, David Martín, en declaraciones a la Real Federación Españla de Natación.

“Va a ser un partido muy difícil. Para ellos esta medalla sería histórica, tenemos que estar preparados ante un equipo que lo va a dar todo y ha demostrado tener mucha calidad, eliminando a Hungría en cuartos y perdiendo en penaltis contra Croacia”, recordaba Martín, quien alerta del “físico” de Francia “con jugadores pesados y que tiene talento, sobre todo en Vernoux y Crousillat; y los demás jugadores están demostrando que  están acompañando muy bien”.

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