Julia López, nueva número uno amateur: “Puedo llegar lejos”

La generación dorada del golf femenino español continúa derribando puertas y sumando hitos que ponen en valor a una camada que apunta a irrumpir con fuerza en unos pocos años. Una de las principales líderes de este grupo es Julia López Ramírez (Benahavís, 21), quien la semana pasada se convirtió en la primera española que lidera el ranking mundial femenino amateur, aquel en el que se congregan las grandes promesas del golf mundial. La malagueña continúa desarrollándose en Mississippi State, universidad norteamericana con la que no para de sumar éxitos: lleva ocho triunfos (récord del programa), dos años seguidos siendo la mejor golfista de la Conferencia Sureste (SEC)... Además de otro sinfín de éxitos con España, como el Europeo individual y por equipos. Llamada a hacer cosas grandes, Julia habla con AS sobre el dulce momento que atraviesa y lo que le depara el futuro.

Pregunta: Número uno del mundo, se dice pronto. ¿Cómo se siente?

Respuesta: Me enteré cuando estaba empezando a jugar la segunda ronda del Europeo la pasada semana. Sabía que la que iba primera (Helen Briem) se había hecho profesional y yo era la que iba detrás, pero pensaba que no se iba a actualizar hasta la semana que viene. Entonces fue una sorpresa, lo primero que hice fue llamar a casa, es una alegría supergrande y mi madre y yo nos pusimos a llorar. Es algo inolvidable.

¿Tenía el número uno como meta?

Yo siempre miro alto, me pongo metas altas, si no se pueden conseguir pues nada, pero siempre intento tener metas bastante altas y llegar a ellas. Y la verdad es que sí, el número uno siempre fue una de ellas. Me la puse cuando estaba en la Blume, obviamente era muy complicado llegar a ello, pero fíjate tú, con trabajo y esfuerzo he llegado.

¿Y qué metas tiene ahora pendientes?

Ahora quiero mantener el número uno todo el tiempo que pueda, y cuando llegue a Estados Unidos el mes que viene seguir jugando torneos y dando la cara, intentar seguir ahí arriba del ranking y mantenerlo el mayor número de semanas posibles.

¿Qué hoja de ruta tiene para convertirse en profesional?

Pues a mí me queda un año de universidad (estudia Económicas), entonces el plan es terminar mi año de universidad y, una vez acabado, dar el paso a profesional. Quiero intentarlo en Estados Unidos, quiero probar por ahí de primeras y después seguir por ahí, intentándolo en Estados Unidos para conseguir la tarjeta de LPGA, esos son los objetivos que tengo por lo pronto.

¿Qué le está aportando vivir, entrenar y competir en Estados Unidos?

Ahí te ponen todo muy fácil para que puedas compaginar estudios y golf, y a mí eso me ha ayudado mucho para poder seguir estudiando y sacarme una carrera. Hay competición individual, pero también por equipos y es que entrenamos todas juntas, jugamos los torneos juntas... Allí te ayudan a preparar los entrenamientos, te puedes organizar más o menos como tú quieres y ellos te ponen todo sobre la mesa. Cada persona es un mundo y necesita cosas distintas y ellos se adaptan a todo.

En Mississippi State es toda una institución, la jugadora con más victorias.

Es un logro el poder tener tantos récords y haber ganado todos esos torneos para la universidad, pero es que, como he dicho antes, soy una persona que me pongo las metas muy altas. Y creo por eso que nunca es suficiente.

Y ya ha jugado torneos profesionales, incluso pasó el corte en un British Open. ¿Cómo se ha visto al lado de las mejores del mundo?

Yo creo que el golf está ahí, y que tengo el juego para poder ser profesional, pero obviamente quedan cosas por pulir, como puede ser el tema del entreno, ir al gimnasio... Eso lo hago, claro, pero a nivel profesional todas ellas tienen mucho más tiempo para dedicarse al deporte. Yo ahora estoy en un 50-50 entre colegio y golf. Entonces eso va a ser distinto cuando me haga pro, no tendré que estudiar y podré invertir más tiempo en el golf, llevando mis entrenamientos a un siguiente nivel. Yo creo que ahí voy a poder mejorar y dar ese pequeño paso, que es lo que me falta.

Forma parte de una generación dorada, ¿qué tienen de especial usted y todas las jugadoras españolas con las que hace equipo?

Sobre todo hacemos muy bien equipo. Cuando competimos por España, y también cuando es un torneo individual, siempre nos apoyamos mucho las unas a las otras y luchamos en todo momento. Todas tenemos mucha garra, mucha ilusión con lo que viene por delante, y eso yo creo que es lo que nos hace estar arriba. Tenemos todas mucha alegría y entusiasmo por seguir y por poder ganar más medallas y torneos.

Y con las estrellas españolas como Carlota Ciganda, ¿cuál es su relación?

Con Carlota jugué dos rondas en el Open de España del año pasado, y la verdad que fue un honor el simple hecho de poder jugar con ella, que te trate como una amiga, como una española más. Ha venido a concentraciones de la Federación Española y nos ha ayudado mucho, nos ha guiado. Yo creo que eso siempre es algo que nos ha mantenido en la línea y por el buen camino.

Para quien no le haya visto jugar, ¿cómo se define en el campo?

Soy una persona muy sonriente por el campo, me gusta ir a mi rollo y feliz. Me gusta mucho pegarle bombas al drive, darle fuerte, es algo que me alegra. Soy agresiva en el sentido de jugar al deporte, y eso es algo que me da la chispa para seguir y tener motivación por delante en cada hoyo.

¿Y fuera del campo?

De siempre me ha gustado mucho conducir motos, mi padre siempre ha hecho trial y la moto es algo que ha estado por mi casa en todo momento. Desde pequeña empecé con el golf y las motos, y es algo que me ayuda y me relaja, me divierte cogerla. También hago mucho deporte, al fútbol juego de vez en cuando... Aunque tengo que tener un poco de cabeza, no me puedo lesionar, entonces me lo tomo con un poco más de tranquilidad y no voy tan a lo loco.

¿Dónde se ve a largo plazo? ¿Sueña con algún torneo en particular?

El paso al profesionalismo no es tan fácil como parece y se necesita mucho trabajo, pero la verdad es que siento que puedo llegar lejos y que puedo hacer algo por España y por mí. No puedo esperar para poder dar ese paso y estar con las mejores, sobre todo demostrar y decirme a mí misma que soy capaz de ello. Juegos Olímpicos y Solheim siempre está ahí lo primero, siempre ha sido una meta que tengo porque es bonito representar a España o Europa en un deporte tan individualista. Creo que esos dos torneos están en mi top, con los que siempre he soñado.

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