Goikoetxea cuelga la cesta

Iñaki Osa Goikoetxea (Zumaia, 1980) cuelga la cesta. Este domingo, a partir de las 12:00 horas en Gernika deja atrás casi tres décadas de magisterio, una maravillosa carrera, después de su debut en Milán en 1996. Como siempre, es favorito junto a Unai Lekerika, el mejor zaguero de la actualidad, ante Aritz Erkiaga e Ion Ibarluzea en la final del Eusko Label Winter Series. La historia de un gigante llega a su fin. Después de Italia, a donde se fue con 16 años, el puntista más importante del siglo XXI tuvo que abrir camino dos años en el norte de Newport, cuatro en Orlando y 13 en Miami. Dos décadas dando vueltas. Los últimos 5 años ya estuvo yendo y viniendo a México y Estados Unidos hasta por fin ya fijar la base en su casa. “Mi vuelta fue un cambio total. Me fui soltero y volví con mujer y dos niños (risas)”. En la retina siempre queda la preciosa época del jai alai antes de la huelga de finales de los ochenta. La importancia de la cesta estaba bajando. Había más deportes para apostar, más oferta de ocio en Estados Unidos. Antes era solo frontón, NFL y poco más.

Era el mejor del mundo claramente, los resultados y su juego le avalaban, un ejemplo y referencia para todos los pelotaris. Deslumbraba el brillo del número 68. “Yo veía la cesta en casa y solía cogerla para jugar con una pelota de tenis en la pared de la cocina. Un día, mis dos hermanos mayores me llevaron a probar en el frontón, hasta que cogí una pequeña base y entonces empecé a jugar en la escuela del pueblo. Y desde entonces ha sido un sin parar...”. Ha ganado 13 veces el Individual, solo perdió una final (Bereikua es el único que puede jactarse de haber doblegado al gigante de Zumaia) y siete del Parejas, siete veces la Triple Corona y quince Individuales en Miami. Se llevó todos los torneos estivales en los que participó. Su nombre está en la historia. En 27 años, ni una lesión. Es prácticamente imposible encontrar una carrera profesional tan longeva en un deportista que debuta tan joven. y ha sido muy querido. Dio un giro muy mediático a su carrera en 2016 tras unirse a la plantilla de deportistas de Red Bull y también hizo un anuncio para Loewe en 2014. Rompió la tradición de cascos blancos por uno con colores llamativos. Deja la cesta en buenas manos, relanzada en Euskadi.

Como pasos curiosos, el récord Guinness de velocidad de lanzamiento de pelota. Lanzó la bola a 313 km/h, casi nada. “El récord lo viví muy bien, pero una vez de que salió (risas). Toda la previa y los preparativos los viví con mucha tensión. Empezamos preparando una cesta en donde la pelota pudiera salir con más velocidad. Hubo un proyecto en el que se implicó a todas las universidades de España en el que muchos estudiantes de ingeniería asumieron como proyecto final de carrera fabricar esa nueva cesta. Cada uno preparó su propio prototipo. Fue divertido ir hablando con toda esa gente para ayudarles a terminarla e intentar que cumpliera nuestro objetivo de que la pelota saliera con más velocidad. Una vez que decidimos cuál era la cesta ganadora, ya empecé a probarla e hicimos unas pruebas para ver cómo salía la pelota”. Tuvo que fortalecer diferentes músculos. Aunque era la misma postura que un lanzamiento en la pista, había que lanzar muy fuerte y había que trabajar más el hombro, cintura, piernas, mucho gimnasio y alimentación... “Fue muy exigente, pero mereció la pena porque lo conseguimos”.

Hace ocho meses anunció que lo dejaba y desde entonces ha ido recibiendo el reconocimiento y el cariño de la afición de cada frontón que pisaba. En Gernika retumbarán sus últimos pelotazos y su sonido perdurará en el tiempo. La final de las Eusko Label Winter Series (ETB-1) ha levantado enorme expectación por el sonado adiós. Goikoetxea y Lekerika quedaron encuadrados en el grupo A junto a las siguientes parejas: Olharan-Del Río, Goitia-Basque y Erik-Minvielle. ‘Goiko’ y ‘Leke’ superaron la fase de grupos con pleno de victorias; tres de tres. Lograron el pase a las semifinales y en la eliminatoria en la cual se jugaban el billete para la final salieron victoriosos ante Johan y López, segundos en el grupo B, por 15-8, 9-15 y 5-4. Por otro lado, Erkiaga e Ibarluzea compitieron en el grupo B junto a Johan-López, Laduche-Gorka y Arbe-Manci. La pareja Erkiaga-Ibarluzea ganó todos sus encuentros en la fase de grupos y selló su billete para la semifinal. Ya en la eliminatoria previa a la final, Erkiaga e Ibarluzea se impusieron a Olharan y Del Río, segundos del grupo A, por 15-8 y 15-13.