Trabajo a destajo de los clubes para recuperar jugadores ante la Final Four

Los cuatro equipos clasificados para la Final Four de la Champions League ya están en capilla. Todo está preparado para las semifinales del sábado (Barça-Magdeburgo a las 15:15, y PSG-Kielce a las 18.00), y el desenlace del domingo, pero este viaje al colosal Lanxess Arena con las 21.000 localidades ya vendidas no es sencillo para ninguno de los cuatro mejores equipos de la temporada, que apuran la recuperación de sus jugadores antes del viaje a Colonia (Alemania).

En este momento es el Kielce polaco el que más problemas tiene para configurar su formación. En la final de la Copa de Polonia, en un mismo partido, perdió al pivote Karalec, y a los centrales Karacic y Olejnizak, a los que suma la baja de Remili, que dejó el equipo mediada la temporada para reforzar al Veszprem magiar. En otras condiciones estarían descartados, pero es la cita de clubes más importante del año.

El Magdeburgo toma respiro porque recupera a sus dos lesionados importantes, el pivote danés Jensen, y el central islandés Kristjansson, que en un tiempo récord ya parece estar listo para jugar tras la fractura de tobillo en los cuartos de final de la Champions.. “Parecía que estaba todo perdido, pero me dijeron que había una posibilidad de llegar a la Final Four, y acepté el reto”, comentó el islandés tras reaparecer la semana anterior.

El PSG no ha estado en la final de la Copa de Francia, que acabar de conquistar el Nantes, pero además de caer en las semifinales el equipo parisino perdió a una de sus estrellas, el lateral Prandi, una baja notable, y con un Nikola Karabatic desaparecido esta temporada. El Barça, por su parte, lo que ja intentado en el último mes es que sus renqueantes estén todos disponibles (y lo están), y que Langaro llegue a Colonia con opciones de aportar minutos de calidad al juego azulgrana.