¿Qué tienen que hacer las Guerreras para seguir? Rezar... y ganar

Llegó el fin de semana, la última jornada del Mundial para 16 selecciones de las 24 que siguen en la competición. En el grupo de las Guerreras, que se decide hoy, tres equipos compiten por ser el que acompañe a Alemania a los cuartos de final: Serbia, Montenegro y España. De los tres, sólo Serbia depende de sí misma, y le vale incluso el empate ante Montenegro; a las montenegrinas sólo les vale ganar y que España no lo haga luego frente a Alemania: al revés que las españolas, que necesitan el triunfo de Montenegro y luego ratificarlo en Dortmund frente a las alemanas.

Ona Vegué (27), de Granollers, hija de Lydia Pena, internacional histórica española, lleva “dos años y medio en Alemania”, en el Blomberg-Lippe, por lo que conoce perfectamente a las rivales de las Guerreras: “Hablamos entre nosotras, pero a este nivel ya nos conocemos todas. Siempre hay alguna jugadora de la que no se tiene mucha referencia, como mi compañera de equipo Kuhne, que está jugando muy bien. Todas sabemos que Alemania está jugando muy bien, que Emily Vogel y Xenia Smits son básicas en la primera línea”.

Tal y como ha ido el Mundial, las alemanas han superado todos sus partidos goleando a sus rivales, y aunque en los tres últimos duelos directos (Mundial de hace cuatro años y Europeo), ganó España, esta vez el choque tiene color local. “Nosotras vamos lidiando cada partido como una final, pero ahora llega la grande, que sabemos que es difícil, pero no es imposible, porque podemos ganar o perder con cualquiera; dependemos de nosotras mismas; es decir, respeto al rival, ser nosotras mismas y confiar en el grupo”, resume Ona, extremo izquierdo del equipo, que tiene a su familia en Alemania viéndola jugar: “Hoy no vamos a escuchar a la familia. Habrá 10.000 seguidores alemanes, que más que al balonmano siguen en deporte a su país. Su balonmano femenino nunca ha estado en los tres primeros del mundo, pero esta selección se ha preparado durante años, y está actuando a un grandísimo nivel”.

En la posición de Ona también actúan Jennifer Gutiérrez (el golpe en el codo ante Islandia quedó en nada) y Oppedal, por lo que el descarte que tiene que hacer Ambros siempre es en el extremo izquierdo. “Nunca sabes si vas a jugar; el seleccionador lo comunica cuando da la convocatoria en la comida”, explica Vegué, que estudió diseño industrial, “y ahora alemán, claro”.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí