Emil Nielsen amarga la tarde a sus compatriotas del GOG

Prepararon el partido con detalle, llevaron el encuentro a un pabellón más grande pese al esfuerzo (de Gudme a Kolding, dos horas de ida y vuelta) y organizaron una fiesta pero todo fue como siempre: el Barça celebró la victoria, la décima para reforzar su liderato, 23-30 (14-17) en una tarde en la que otro danés, pero con el escudo azulgrana, amargó a los atacantes locales con 20 paradas a 43 lanzamientos. Con esa aportación de Emil Nielsen no se puede exprimir a los jugadores de campo: fue un día casi de descanso activo.

Carlos Ortega introdujo una variación en sus cambios ataque/defensa: N´Guessan entraba por Petrus, pero si se aparaba la oleada atacante, Richardson relevaba a su compatriota para el juego posicional; es decir, tres jugadores para un puesto en la transición al ataque. Y los centrales, para después: Petar Cikusa tuvo una tarde gris y Pol Valera cerró el partido animado para aportar.

En la pugna de los goles, Madsen añadió seis a su cuenta de 66 en la Champions: el séptimo se lo negó Gonzalo Pérez, que sólo entró para esa acción, y paró el penalti. Mem no pudo restar diferencias sólo sumó cinco, pero tampoco se necesitaba más.

¿El partido? De guante blanco, en el que siempre mandó el Barça, que al llegar a cinco de ventaja vegetó un poco en la segunda parte, para espolear a la muchachada del GOG que no encontró premios en su esfuerzo ante la exuberante actuación del risueño, coloradote y genial Nielsen.