El Logroño se deja un punto ante un gran Guadalajara
El Cívitas Guadalajara, colista, tuvo fe en la victoria hasta el último momento y dispuso de bola para ganar. El Logroño, fuera de puestos europeos.
El Logroño La Rioja cedió este domingo un empate 24-24 en la cancha del colista, un Cívitas Guadalajara que tuvo fe en la victoria hasta el último momento y que dispuso de bola para llevarse los dos puntos. Fue un choque con emoción, alternativas y un poco de polémica, que en nadie tuvo en momento alguno dominado a su adversario.
La primera parte tuvo dos mitades bien diferentes. En la primera dominó Logroño, con una dura defensa que se anticipó en numerosas ocasiones a los pases de sus adversarios, propiciando contras letales que llevaron al equipo riojano hasta su máxima diferencia (5-9). Precisamente eran los exmorados Korchi y Antonio Serradilla quienes más veces hallaron la red de la portería contraria en estos compases del encuentro.
Pero la segunda hornada de pupilos de Miguel Angel Velasco no fue capaz de mantener la tensión y fiabilidad defensivas. Alberto Serradilla, hermano de Antonio, fue el revulsivo que propulsó a los locales, revirtiendo la situación. Dutra y Preciado no lograban afinar la brújula del ataque logroñés. La defensa morada, despierta y atenta, facilitó que Dani Santamaría se luciese bajo palos, lanzado al equipo a correr a la contra, como más le gusta. Un parcial de 6-0 sirvió para igualar la contienda y para llegar al descanso con un 14-11 a favor del BM Cívitas Guadalajara, difícil de imaginar vistos los primeros 15 minutos del partido.
En la reanudación se mostró de nuevo más compacta y compenetrada la defensa visitante, y la diferencia del Guadalajara se fue diluyendo. Con todo, hoy los pupilos de Juan Carlos Requena querían los puntos y recuperaron su máxima renta (19-16), para después volver a perderla (19-19), de nuevo merced a los goles de Korchi, este domingo especialmente motivado frente a su ex equipo.
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El choque entró en una fase de máxima igualdad que desniveló el acierto de Mamadou Dioucou, especialmente desde los siete metros, donde se mostró infalible, y también a los primeros tantos de Alvaro Preciado. Sus goles eran contestados por los del máximo goleador del Cívitas, Tito Díaz.
El duelo entró en tablas en su último minuto y la bola la tenía Logroño. Antonio Serradilla se hizo un lío con ella, y le tocó el pie. Pasando la posesión a Guadalajara, que disponía de 19 segundos. Dispuso de lanzamiento su hermano Alberto, para ganar el partido, pero la pelota llegó mordida a las manos de Jorge Pérez. Tablas en el Municipal David Santamaría, que no satisfacen a ninguno de los contendientes.