BALONMANO | MUNDIAL DE CLUBES

El Barça de Ortega afronta en El Cairo su asignatura pendiente

El Magdeburgo ha estropeado dos años seguidos el título que se le resiste al entrenador malagueño, que debuta el sábado ante la U. de Sydney.

Piotr PolakEFE

Con Carlos Ortega en el banquillo el Barça ha ganado dos Champions, y todas las competiciones domésticas. Se podría decir que el malagueño lo ha ganado todo como técnico, salvo el Mundial de Clubes, antes Super Globe, que siempre se la ha tenido por una competición menor, pero desde que destina 400,000 euros al ganador, los equipos europeos ya ven a esta cita oficial,con otros ojos.

El Barça es el equipo con más títulos, cinco en las 17 ocasiones que se ha disputado, pero en las tres últimas ediciones, nada. El Magdeburg se ha convertido en su bestia, y la competición es la pesadilla de Ortega. En esta edición salta a El Cairo (Egipto), con nueve equipos, de ellos tres europeos (Barça, Magdeburg y Veszprem), con lo que en las semifinales habrá al menos un conjunto de otro continente, y no como el año pasado en Arabia Saudí, con los cuatro europeos.

La competición se disputa de entrada con tres grupos de tres equipos, con lo europeos de cabeza de serie (el Barça, en el grupo B con el Al Ahly local y la Universidad de Sydney, un clásico, y con el que debuta el sábado el campeón español), y con tres partidos ya este viernes (sin europeos, que debutan el sábado por sus compromisos del miércoles en la Champions.

Debuta en el Mundialito el campeón de Estados Unidos, en el que están el pivote Donlin (jugó en el Ademar), y el madrileño García Uceda, aunque lo más relevante es que su entrenador es el argentino Gonzalo Carou, que lleva veinte años en España donde tiene fijada su residencia, y que prácticamente ha dirigido a distancia al que será su equipo.

Como siempre, destaca la presencia de entrenadores españoles, porque además de Ortega, llega Xavi Pascual (Veszprem) y Fernando Barbeito (Zamalek), ambos de pasado azulgrana. Otra curiosidad es que coinciden los tres porteros habituales de Jordi Ribera con los Hispanos: Gonzalo Pérez (Barça), Corrales (Veszprem), y Sergey Hernández (Magdeburg); estos dos últimos con compañeros españoles, Agustín Casado y Serradilla, el mayor de los hermanos porque el pequeño sigue en el Guadalajara.

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