Mañana de vaivenes: alegrías y sustos para España

El Atakoy Arena abría otro día nublado en Estambul con vitalidad, competición del más alto nivel y ocho atletas españoles en la sesión matinal de la segunda jornada. Los más madrugadores, Jaime Guerra e Iker Arotzena en la clasificación de longitud con el objetivo de saltar 7.95 o al menos estar entre los ocho saltadores, de los 18 participantes, con billete para pelear por las medallas en la final del domingo (8:12 horas). El barcelonés (23 años), campeón de España con su mejor brinco de 8,08 (marca personal), hizo nulo en la primera tentativa y se dejó 14 centímetros en la segunda para llegar a 7,76. Una medición que podía ya permitirle entrar en el club de finalistas. Por si acaso, voló hasta 7,99 en el tercero certificando sin mirar la tabla de resultados que estará luchando por los metales. “Si estoy en mis marcas pelearé por una medalla”, afirmaba el de Sant Boi en zona mixta. Por su parte, el saltador nacido en Hondarribia hace 21 años hizo tres saltos válidos: 7,35; 7,57 y 7,36... pero lamentablemente no le dio para pasar quedando en el décimo puesto de una clasificación que lideró el sueco Thobias Montler (8,14) seguido del gran favorito al oro, el griego Miltiadis Tentoglou (8,03).

Del foso al anillo con la primera ronda de los 400 metros, prueba en la que España tenía depositadas muchas esperanzas tanto en la terna individual como en el relevo del domingo. Iñaki Cañal inauguraba en la serie 2 y lo hizo de manera fantástica... aunque con mal final. Calle libre ganada, victoria con 46.26 y pase a semifinales (hoy, 17:35) con Q mayúscula en toda regla justo antes de caerse al cruzar la meta y hacerse una subluxación de la articulación esternoclavicular derecha. Mucho dolor y baja para la siguiente ronda... y en el relevo. “He caído con todo el peso del cuerpo sobre mi hombro y la clavícula se ha salido del sitio. Alos tres segundos me he dado cuenta de que por desgracia mi campeonato se había acabado. Es una pena, pero hay que aceptarlo”, decía el gijonés.

La serie 4 era la elegida para el campeón y recordman nacional (45.58) Óscar Husillos. El palentino que entrena Luis Ángel Caballero salió relajado, acabó segundo con 46.28 y bastante enfadado: “Teniendo dos semifinales pasar como segundo hace que entres en el sorteo para salir por calle 4 como mejor opción y en pista cubierta sabemos la penalización que lleva eso de lo que es correr por fuera o por dentro. La semifinal será una final”. Eso sí, mostraba su optimismo: “Me he encontrado muy cómodo y fuerte. Estoy muy bien pero la gente también viene al 100%”. Su gran rival, el noruego Karsten Warholm firmó el mejor tiempo de todos los participantes con 45.75.

En la serie final Manuel Guijarro fue último con 49.77 y problemas: “Tengo una lesión en el isquio y me molesta el tendón. Es una pena haberse estado preparando tanto para un campeonato y que pase esto”. Dos ausencias para la final del 4x400 del domingo que hará debutar a Markel Fernández (vizcaíno, 20 años) y David García Zurita (madrileño, 17) junto a Husillos y Lucas Búa. Siguiendo con la matinal y tras ver una exhibición de la talentosa neerlandesa Femke Bol ganando su serie del 400 andando con 52.35 llegaba el turno del 1.500 femenino con Águeda Marqués y Esther Guerrero. La segoviana de 23 años se puso a espaldas de la italiana Del Buono y ambas fueron controlando la carrera hasta que se desencadeno el ataque del resto en los 100 metros finales, pero la brava española apretó los dientes para meterse tercera con 4:23.39. Pase a la final (sábado, 18:00) por puestos. “Estoy muy feliz. Quería meterme en la final como fuera y lo he dado todo. Venía preparada, he salido a por todas y lo he logrado. Ahora a disfrutarlo, ojalá salga la carrera rápida y a morir en la pista”, decía Águeda que explicó el cambio de orden de sus apellidos (Marqués por Muñoz) porque “me gusta más, adoro a mi padre pero no sé porque siempre tiene que ir delante el del padre al de la madre”.

Por su parte, la gerundense de 32 años dominó su serie con 4:10.48 para sellar un brillante paso también a la final... aunque luego sus sensaciones no fueron las mejores. “No me he encontrado lo bien que me habría gustado, pero sí es verdad que aunque no he corrido muy cómoda correr en 4:10 es para estar contenta. No me ha costado ponerme delante, iba rápida y a ver cómo me recupero para mañana. La final creo que será la carrera que Laura Muir quiera, aunque creo que no está tan bien como otros años. Espero que se corra mucho y muera la mitad menos yo... (risas). Si me dicen que voy a estar aquí habría dicho que no. No he hecho entrenamientos de láctico ni de intensidad. He entrenado muy diferente con todo trabajo aeróbico y espero que tanto volumen me permita recuperarme mejor”, aseguraba la guerra de Bañolas.

La última representante en la pista fue Jaël Sakura Bestué que pasó la primera ronda con tranquilidad. Segunda (pasaban cuatro) con 7.30. Esta tarde, semifinales y ojalá que la final. “Me encuentro muy bien, aunque es verdad que tengo que mejorar muchísimo la salida porque me he quedado totalmente. Debo centrarmey si lo consigo me veo en mis marcas o incluso mejor”, aseguraba la mujer más rápida de España en la actualidad. Además de la velocista habrá cuatro españoles más en competición: Óscar Husillos (semifinal del 400), Jesús Gómez (final del 1.500), Marta Pérez y Marta García (final del 3.000).