“Esperaba una carrera táctica, no a toda leche... pero he pasado”

Dicen que ir poco a poco mejora el resultado final, pero en los Europeos de Roma España desplegaba arsenal desde el minuto uno. Nada menos que quince españoles debutaban en la jornada matinal de la primera jornada del certamen en el Estadio Olímpico de la ‘Ciudad Eterna’. El discóbolo Yasiel Sotero abría el fuego y el atleta afincado en Gran Canaria no tuvo su mejor desempeño. Un mejor lanzamiento de 60,37 le alejaba de los doce puestos de finalista. “Toca seguir aprendiendo pero lógicamente me voy con una sensación agridulce”, dice Sotero. Mismo destino que Diego Casas, que lanzó 60,25.

Era el momento de otro tótem del atletismo español pese a que las cosas llevan años sin salirle bien debido a las lesiones. Orlando Ortega, subcampeón olímpico en Río 2016 y bronce Mundial en Doha 2019, volvía con España tras casi cinco años y pasó la primera eliminatoria de 110 vallas. 13.79 para ser séptimo, con un tiempo de reacción malo (0.180) pero estará en semifinales junto a Asier Martínez y Quique Llopis, que por ranking ‘Road to Rome’ se saltaban la ronda inicial. No estarán el cuarto español, Kevin Sánchez (7º en su eliminatoria con 13.95).

Mientras la pista ardía, el círculo del peso veía a Belén Toimil certificar su billete a la final de peso con un mejor lanzamiento de 17,76 que le colocaba 10ª y estará entre las 12 finalistas de esta tarde (21:33). Si repite su mejor lanzamiento de 2024, hace apenas un mes (18,47), no debería estar lejos de pelear por el podio. “Estoy contenta, el primer objetivo era estar en la final, y ahí estoy. A nivel de sensaciones me encontré bien aunque no ha salido el lanzamiento que esperaba. En la final espero subir bastantes puestos y acercarme a las medallas”, afirmaba la española.

Imperial se mostraba Ana Peleteiro que entró a la final de triple (domingo, 21:04) como las grandes. Un único salto de 14,21 y a la ducha. Sin desgastarse, como quería la fabulosa atleta gallega. Su idea es el oro en Roma y la primera piedra está puesta. “He tenido muy buenas sensaciones. Me he sentido muy bien testeando un poco la pista porque es algo nuevo y no estoy muy acostumbrada. Ya estoy tranquila y tengo muchas ganas ya de final”, asegura Ana.

La primera ronda del 1.500 femenino tenía al dúo de guerreras habitual... que no decepcionaron, como nunca lo hacen. Esther Guerrero (6ª en su serie con 4:07:01) y Marta Pérez (6ª también en la suya con 4:12.63) para entrar en la final (domingo, 22:36). “Objetivo conseguido... aunque he corrido como no quería y las sensaciones han sido raras”, afirma Esther, mientras Marta explica: “Estoy contenta porque he corrido por dentro y colocada. He sabido mantener la calma pese a ir un poco encerrada. Ahora toca pensar en la final donde la idea real es estar entre las ocho primeras”.

Seguros de vida que también tiene España en el 800. Tres representantes, tres semifinalistas. Álvaro de Arriba lograba su pase al ser tercero (1:46:03) tras aguantar como un titán en la recta final, Adrián Ben se llevaba el triunfo en su serie (1:46.39) pese a no estar al 100% por un problema vírico, Moha Attaoui pasó por tiempos al ser quinto (1:45.09) en la serie más veloz. El 800 es una prueba muy complicada y pasar cada eliminatoria ya es un premio importante. El siguiente paso serán las semifinales (sábado, 19:50).

“Llevo una semana en la que no me encuentro físicamente como esperaba por una pequeña enfermedad, pero he podido competir y llevarme una victoria en una serie casi con rango de final por los participantes. Las sensaciones han sido muy buenas. He dado el 100% y mi cuerpo ha respondido. Primer paso dado, ahora toca pensar en las semifinales”, afirma Ben. “Estoy contento porque siempre hay nervios para la eliminatoria. Me he encontrado con sensación de ir justo, pero luego todo ha empezado a rodar”, decía De Arriba. El último en hablar, Attaoui: “Esperaba una carrera más táctica, no a toda leche como ha sido. Me he encontrado regular, pero he podido pasar por tiempos y al ver la marca me he quedado más tranquilo”.

La gran mañana española seguía. Eusebio Cáceres entraba en la final (sábado 20:06) con un mejor brinco de 7,98 (su mejor marca de la temporada). Y un nulo muy largo que da esperanzas de verle de nuevo por encima claramente de los 8 metros. Eso sí, hubo nada menos que 9 atletas por encima de esa medición, destacando el decatleta suizo Ehammer, que en su único intento se fue hasta 8,41. Y el fin de fiesta matinal, el 3.000 obstáculos femenino. Irene Sánchez-Escribano era séptima (9:34.80) en la primera serie y Carolina Robles, 6ª en la segunda (9:33.79) para meterse ambas en la final del domingo (22:04). “Feliz por meterme en mi tercera final europea consecutiva”, dice Irene. Algo que no conseguía Blanca Fernández de la Granja (14ª con 10:08.59). Estreno fantástico de España en los Europeos de Roma 2024. De quince participantes, 11 pasaron ronda y 7 de ellos ya están en la final.

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