La IBA premiará a Carini como si fuese oro y el COI avisa: “Son mujeres, el odio es inaceptable”

El caso de las dos boxeadoras intersexuales, la argelina Imane Khelif y la taiwanesa Lin Yu-Ting, sigue resonando en París, después de que el altavoz, a veces distorsionador, de las redes sociales extendiera la polémica por todo el mundo. En una comparecencia para hacer balance del ecuador de los Juegos, el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Tomas Bach, salió en defensa de ambas.

“Nacieron y crecieron mujeres, en su pasaporte figura que son mujeres y han competido muchos años como mujeres. No hay dudas sobre que sean mujeres. Los que dudan, deberían aportar estudios científicos y si vienen con ellos, les escucharemos. Pero no se toman decisiones por motivaciones políticas o llegaremos a una guerra cultural. Lo que se está viendo en las redes es un odio inaceptable”, expresó el alemán, en referencia también a la campaña de la ultraderecha italiana a favor de la italiana Angela Carini.

Cabe recordar que es el COI el que organiza la competición de boxeo, puesto que suspendió el año pasado a la IBA (Asociación Internacional de Boxeo) por sus problemas de corrupción que vienen desde Río 2016, cuando se sucedieron los escándalos de arbitraje y se descubrieron irregularidades financieras y espera la constitución de una nueva federación para que el boxeo no salga de Los Ángeles 2024. Ahora, la IBA está gobernada por el ruso Umar Kremlev, que ha regado con dinero de la empresa Gazprom el boxeo. Y Rusia está vetada en París, salvo 15 deportistas ‘limpios’ respecto a la invasión de Ucrania.

Precisamente, y para incomodar el COI, la IBA anunció un premio de 50.000 dólares para cada campeón. Y hoy anunció que se los concederá a la italiana Angela Carini, que se retiró en su combate contra Khelif a los 46 segundos quejándose no haber sido golpeada nunca tan fuerte.

“La IBA está expulsada por diferentes razones y está tomando la postura de difamar a Francia, a los Juegos y al COI”, dijo Bach, deslizando manejos políticos detrás de la queja de IBA, que había permitido competir a Imane Khelif y Lin Yu-Ting hasta que decidió suspenderlas el año pasado. Según varios medios, por altos niveles de hormonas masculinas y presentar cromosomas XY, aunque los resultados oficiales no se han publicado. Sus órganos sexuales son femeninos.

Algunas federaciones, como World Athletics y a raíz del caso de Caster Semenya, decidieron poner un límite de 5 nanomoles de testosterona en sangre para prohibir la participación de atletas cisgénero en carreras de los 400 metros a la milla. Y a esa comparación también respondió Bach. “En el atletismo hubo un acercamiento científico. Tienen sus reglas y, como todas las federaciones internacionales, lo que se debe es respetar los derechos humanos y dar prioridad a una competición justa, y eso es lo que están haciendo”, dijo.