Anne Hidalgo cumple su promesa de bañarse en el Sena: “Está descontaminado”

Hace un siglo que nadie se bañaba en el Sena a su paso por el centro de París, principalmente porque ha estado prohibido. Y, sin embargo, en cuestión de cinco días ya se han zambullido en el mítico río, a la altura del puente de Alejandro III, una ministra y la propia alcaldesa de la capital francesa. Tras Amélie Oudéa-Castéra, la responsable de Deportes del gobierno central, este miércoles cumplía su promesa Anne Hidalgo. Y todo, en un intento de demostrarle al mundo la salubridad de unas aguas en las que deben transcurrir los diez kilómetros de la maratón acuática y el triatlón, además lógicamente de la ceremonia inaugural, durante los inminentes Juegos Olímpicos.

Cinco minutos duró el nado de la alcaldesa parisina, previsto inicialmente para el pasado 23 de junio pero que se tuvo que atrasar precisamente porque tras las lluvias de mayo el nivel bacteriológico del Sena superaba en diez veces los niveles permitidos, especialmente el E.Coli, que ya había obligado a suspender el pasado agosto una prueba de la Copa del Mundo en aguas abiertas. También habían tenido problemas con el caudal. Pero todo esto se ha ido regularizando en julio, gracias en buena parte al tiempo soleado, que ha ayudado tanto o más que los 1.400 millones de euros invertidos en la potabilización del río para estos Juegos.

Desde el pantalán saltaba Hidalgo, vestida con neopreno y gafas acuáticas, y acompañada entre otros por el responsable del comité organizador de París 2024, Tony Estanguet, y por Marc Guillaume, prefecto de la región, en un evento seguido desde la orilla por centenares de curiosos que no dejaban de aplaudir y ovacionar a la alcaldesa, y transmitido en directo tanto por canales de televisión franceses como por agencias a través de las redes sociales a todo el mundo.

“Estamos preparados para los Juegos”

“Es un día fantástico para nosotros”, proclamó la alcaldesa de París poco después de abandonar las aguas. “Este sueño que teníamos de poder bañarnos en el Sena ya es una realidad. Lo será para los Juegos y, a partir del año que viene, para los parisinos y para todos los que aman París y vienen a visitarlo. Ha sido un trabajo enorme con el Estado, de cuatro años, sobre las infraestructuras, los barcos, y hemos conseguido descontaminarlo. Sin los Juegos todo esto no hubiera sido posible”, destacó. “Es la confirmación de que estamos preparados para los Juegos, de que estamos justo donde queríamos estar”, se congratuló por su parte Estanguet, quien apostilló: “Será un magnífico legado”.

Tras el escueto baño de Hidalgo, que practicó su crol en unas aguas no demasiado cristalinas, otro grupo de nadadores realizó un breve entrenamiento de waterpolo, a modo de homenaje al deporte que en los Juegos de París 1924, hace justo un siglo, se practicó también en el Sena a su paso por la capital francesa. A pocos días para que comience la cita olímpica, el único que todavía no ha cumplido su promesa de zambullirse en el emblemático río es precisamente el presidente de la República, Emmanuel Macron, al estilo de su predecesor Jacques Chirac, que se comprometió en 1988 sin jamás llevarlo a cabo.

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