“Talento, ambición y trabajo”

España ha batido el récord del grupo del tiki-taka, suma 30 partidos invicta y si el martes no cede ante Turquía en Sevilla se acercará a la mejor marca mundial de Italia, que estuvo 31 partidos no amistosos consecutivos sin perder. El 27 de marzo, contra Argentina en la ‘Finalissima’ que se disputará en Qatar, tendrá a tiro esa barrera para intentar convertirse en la mejor de la historia en lo que a partidos oficiales sin perder, registro que podría caer precisamente en la Copa del Mundo 2026. Un dato: Unai Simón puede cerrar la fase de clasificación sin recibir un gol en contra, un reto que tiene al alcance y que persigue con ahínco. Este grupo de jugadores no tiene final y quiere hacer historia no sólo con victorias, también con títulos. Su próximo objetivo, el Mundial de Estados Unidos, México y Canadá para el que es favorita en las apuestas.

España no pierde un partido oficial desde el 28 de marzo de 2023, cuando cayó ante Escocia en Glasgow. Desde entonces, suma 30 encuentros sin conocer la derrota, en los que ha conquistado dos títulos —la Nations League en 2023 y la Eurocopa, en 2024— y ha cerrado virtualmente la clasificación directa al próximo Mundial, que puede lograr en Sevilla el próximo martes si no pierde por más de 0-7 ante los turcos, lo que parece imposible.

Pero más allá de los números, que a la vista están, este grupo de jugadores reluce como el sol por otros muchos motivos. El primero por su hambre de ganar, que no tiene fin; el segundo por su juego, espectacular a juicio de todos y el tercero, por su unión como equipo. España es fuerte porque no tiene fisuras y porque, como defiende De la Fuente, “no hay nadie en el mundo con tantos buenos jugadores, los míos son los mejores y la cantera es inagotable”.

El seleccionador defiende con “orgullo y pasión” que vayan cayendo los récords mencionados porque “son el justo premio a un gran trabajo y estos futbolistas los persiguen con sin desmayo, con una ambición que no tiene fin y que yo aplaudo y aliento”.

Como muestra, un botón: Unai Simón tiene el reto personal de cerrar la fase de clasificación con cero goles en contra. Eso es un logro aún mayor que llevar 19 a favor, con una media de casi cuatro tantos por partido. Su parada en el minuto 90 en el partido de Tiflis así lo atestigua. “Lo importante son los títulos, los logros consecutivos, pero todos los jugadores queremos destacar también en lo individual porque, eso precisamente, ayuda mucho a lo primero”, dijo el meta del Athletic en una entrevista a AS.

El portero y el goleador son los que marcan el éxito de un equipo. Y si lo de Unai es fabuloso, también tiene mucho mérito lo de Oyarzabal. El delantero de la Real Sociedad alcanzó en Tiflis sus 21 goles como internacional, lo que le mete en el ‘top ten’ histórico de la Selección junto a Michel, que es quien ocupa el puesto 10 de esa tabla que lidera David Villa. Una máquina de hacer goles y un jugador fantástico que según Luis de la Fuente “representa los valores de este equipo: trabajo, ambición y talento”, según ha reflejado en alguna otra ocasión. Pero España no sigue la máxima de “un equipo es un gran portero, un gran delantero y nueve más tocando el tambor...”. En España juegan todos, y muy bien. El recital en Georgia, con seis titulares lesionados (Carvajal, Le Normand, Rodrigo, Pedri, Nico y Lamine) así lo constata. Es un equipo fantástico que tiene como principal virtud que no se nota cuando falta uno... ni tampoco media docena. Si llega el próximo 11 de junio con el bloque al completo y sin lesionados, España, actual número 1 del ranking de la FIFA, es seria candidata a revalidar el título de Sudáfrica 2010. Es favorita en las apuestas, y con razón.

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