Preocupa Suiza, no el Mundial

Vuelve la Nations League, que es como el Guadiana del fútbol, y lo hace cuando muchos están ya con el álbum de cromos del Mundial como biblia diaria (que se lo digan a los argentinos, donde casi se ha convertido en cuestión de Estado). La competición aparece y desaparece entre las fases de clasificación del Mundial y la Eurocopa y ahora surge a menos de dos meses de la cita de Qatar 2022. De ahí que la rueda de prensa de ayer de Luis Enrique previa al España-Suiza de esta noche deparara cuestiones cuasi filosóficas como la de “si el presente condiciona el futuro”. Esa fue la pregunta del periodista y la respuesta del seleccionador fue algo así como ni sí ni no sino todo lo contrario. La curiosidad del periodista estaba plenamente justificada: esta es la penúltima lista de convocados previa al Mundial y, además, La Roja tiene el martes el cierre de la Nations League, nada más y nada menos que la visita a Portugal en Braga, posiblemente con el liderato y el consiguiente pase a la Final a Cuatro en juego.

Luis Enrique guarda sus cartas aunque es cierto que ayer dio alguna pista al contestar a otro compañero de profesión con la frase de que “no va desencaminado un ataque con Ferran, Morata y Sarabia”. Ellos son tres de los fijos en todas las quinielas para la gran cita. Da igual cómo hayan arrancado la temporada, si son titulares o suplentes en sus equipos, Lucho tiene claro cuál es el papel que desempeñan y en qué pueden ayudar a la Selección (sigue el partido de hoy en directo en As.com). Frente a Suiza, toda ayuda es bienvenida, como se ha demostrado en la historia reciente. No hace falta rebobinar hasta el Mundial 2010, ya saben, aquella derrota por 0-1 que parecía truncar a las primeras de cambio la enésima ilusión de un país; basta mirar a la Eurocopa del año pasado, en la que necesitamos de la tanda de penaltis para meternos en semifinales, o al partido de ida en Ginebra, en el que un gol de Sarabia nos dio los tres puntos pero no evitó el asedio final de los helvéticos, con los remates finales de Embolo y Sow como grandes sustos.

Yakin confía en Xhaka

Yakin y Xhaka. Murat Yakin, que recupera a algunos de los lesionados de ese encuentro (Okafor es la gran ausencia debido a una lesión), jugado en junio, confiará de nuevo en Xhaka como eje del centro del campo. Sus roces parecen haber quedado en el cajón y el técnico es consciente de que buena parte de las probabilidades de Suiza pasan por cómo esté el centrocampista del Arsenal. “Queremos salir a presionar a España como hicimos en la segunda parte del partido de Ginebra”, avisa Yakin, aunque me da que esa es una frase trampa. En cinco minutos despejaremos la duda. Dice otra cosa que sí nos creemos: “España es un equipo brillante”.

Es cierto, aunque en ocasiones lo demuestra menos de lo que querríamos. La Nations League arrancó torcida (empates ante Portugal y República Checa) y fue precisamente el duelo ante Suiza el que sirvió de punto de inflexión. No podemos descuidarnos y Luis Enrique, que ayer regateó como pudo las preguntas sobre el conflicto que vive la Selección femenina, es el primero en saberlo. Por ello alineará un equipo de garantías con Eric Garcia como posible relevo del lesionado Laporte, un centro del campo en azul y grana integrado por Busquets, Gavi y Pedri y una delantera que ya nos suena a estribillo: Ferran, Morata y Sarabia. Tres puntos nos acercan a la Final Four. ¿El Mundial? Qatar sigue quedando a los mismos kilómetros.