La Rojita, el espejo de la Olímpica

Como si de una brecha temporal se tratase, pasado, presente y futuro de la Selección convergen juntos este fin de semana. Ayer hizo cinco años exactamente desde que España levantó su último Europeo Sub-19 en Armenia. Lo hizo con los jugadores nacidos a partir del año 2000, una generación liderada por Ferran Torres, flamante campeón de Europa, pero en la que también destacaban Abel Ruiz, Miranda, Sergio Gómez y Eric Garcia, que ayer se clasificaron para los cuartos de final de los Juegos Olímpicos y que aspiran a lograr el oro en París 2024. Tan solo un día después de que los campeones de aquel Europeo ganasen a República Dominicana en Burdeos, otra generación dorada del fútbol español espera emular hoy lo que consiguieron los actuales jugadores olímpicos y conquistar el Europeo Sub-19 de Irlanda del Norte, el que sería el duodécimo título de la categoría para el fútbol español.

Es probable que en esta generación de futbolistas nacida a partir del 1 de enero de 2005 no haya un jugador que haya destacado tanto en Primera como Ferran Torres en 2019, que ya había jugado 24 partidos de Liga con el Valencia, pero tiene un bloque muy conjuntado desde hace años, ya que la mayoría llevan jugando juntos en las categorías inferiores de España de la Sub-15. Es el caso de Yarek (Valencia) y Simo (Al Arabi), probablemente la pareja de centrales más conjuntada del mundo en su categoría, con ambos dando sus primeros pasos en el fútbol profesional. O de Iker Bravo, Fortuny, Mella y Dani Rodríguez, que ya dieron a conocer sus diabluras al mundo en el Europeo Sub-17 de Israel hace dos años.

Quién sabe si los Bravo, Yarek, Fortuny y compañía estarán peleando por el oro en los JJ OO de Los Ángeles 2028. De momento tienen una oportunidad única para hacer historia y colocar a España en lo más alto del palmarés del Europeo Sub-19. La Rojita está empatada a 11 títulos con Inglaterra y con la disputa de esta final ante Francia (20:00 horas), ambas suman el mismo número de finales (16). Lo logren o no, la RFEF ya está más que agradecida a esta generación de jugadores que han vuelto a clasificar a España a un Mundial Sub-20 después de doce años de ausencia.

Su rival hoy en Belfast será Francia, un equipo al que los chicos de José Lana ya se enfrentaron en la fase de grupos (2-2) y que está liderado por Bouabré, extremo del Mónaco que es una de las grandes promesas del fútbol francés, y el centrocampista Atangana, que marcó el gol de la victoria en semifinales ante Ucrania y que también ha debutado con el Reims en Ligue 1.

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